El lupus eritematoso sistémico (LES) es una grave enfermedad autoinmune crónica que afecta especialmente a las mujeres y produce diferentes lesiones. Una de sus manifestaciones más comunes es el daño renal, que se conoce como nefritis lúpica. Esta condición impedía que una adolescente de 15 años llamada Uresa pudiese llevar una vida normal, ya que no respondía a los tratamientos disponibles. En junio de 2023, la joven, que ahora tiene 16 años, fue tratada con la terapia de células CAR-T en el Hospital Universitario de Erlangen (Alemania) como último recurso para frenar la progresión del lupus que había deteriorado su función renal hasta el punto de tener que someterse a diálisis.
Este tratamiento fue inusual, ya que las células CAR-T se habían utilizado anteriormente solo para tratar cánceres hematológicos como la leucemia o el linfoma, y en estudios con adultos que padecían enfermedades autoinmunes avanzadas. Uresa fue la primera niña con LES en recibir esta terapia en el Centro Alemán de Inmunoterapia (DZI) del Hospital Universitario de Erlangen. Los resultados de este exitoso tratamiento se han publicado en la revista médica The Lancet.
“Administrar células CAR-T para una enfermedad autoinmune es algo especial, ya que antes solo estaba autorizado para ciertos tipos avanzados de cáncer”, explica el Dr. Tobias Krickau, reumatólogo pediátrico de Uresa en el Departamento de Pediatría y Medicina del Adolescente. Ante el rápido avance del lupus de Uresa, que no respondía a la medicación, el equipo decidió intentar este tratamiento experimental. La terapia implica extraer algunas células T del paciente, modificarlas en un laboratorio para equiparlas con un receptor antigénico quimérico (CAR), y luego infundirlas de nuevo en el paciente para atacar las células B dañinas responsables del lupus.
CÉLULAS CAR-T PARA COMBATIR ENFERMEDADES AUTOINMUNES
En un ensayo clínico realizado previamente por investigadores de la Universidad de Erlangen-Núremberg ya se habían probado con éxito las células CART-T en cinco pacientes con lupus eritematoso sistémico grave y resistencia a tratamientos previos, que experimentaron una remisión de la enfermedad de hasta 17 meses tras recibir la innovadora terapia, según un estudio publicado en Nature Medicine en septiembre de 2022.
Los cinco pacientes mostraron mejoría en los síntomas y desaparición de autoanticuerpos. El reumatólogo Georg Schett, uno de los principales investigadores, destacó que los pacientes no solo mejoraron rápidamente, sino que también perdieron la autoinmunidad asociada al lupus, lo que podría significar una cura a largo plazo. En el ensayo también se observó que la terapia CAR-T presentaba efectos secundarios leves en comparación con su uso en cánceres hematológicos, lo que los investigadores atribuyeron a la menor carga de células B en pacientes con lupus. No se reportaron casos de neurotoxicidad, ni infecciones graves.
En declaraciones a SMC España, Ignacio Melero, catedrático de Inmunología de la Universidad de Navarra, investigador del CIMA y codirector del departamento de Inmunología e Inmunoterapia de la Clínica Universidad de Navarra, señaló que aunque había que ampliar el estudio de esta terapia a más pacientes, “el tratamiento parece razonablemente seguro en términos de riesgo-beneficio y en estos cinco casos se manifiesta eficaz”.
TERAPIA CAR-T COMO ÚLTIMA OPCIÓN CONTRA EL LUPUS
Los síntomas de Uresa comenzaron en el otoño de 2022 con migrañas, fatiga, dolores articulares y musculares, y el característico sarpullido rojo en forma de mariposa en el rostro. Pese a varios tratamientos con diferentes medicamentos, su condición empeoró, especialmente su función renal, lo que llevó a la necesidad de diálisis. El LES es menos común en niños que en adultos, pero tiende a ser más agresivo en los jóvenes, y los tratamientos actuales a menudo causan complicaciones y efectos secundarios graves.
El Dr. Krickau asumió el tratamiento de Uresa a finales de 2022, iniciando terapias aprobadas para niños con el objetivo de suprimir su sistema inmunológico hiperactivo, pero su función renal siguió deteriorándose. Desde marzo de 2023, Uresa pasó más tiempo en el hospital que en casa, aislada de amigos y familiares, lo que afectó a su bienestar emocional.
Sin más opciones de tratamiento, el Dr. Krickau propuso la terapia CAR-T, una idea que requirió una preparación y evaluación de riesgos exhaustivas. Tras superar numerosos obstáculos organizativos y legales, el equipo de Erlangen logró producir y administrar las células CAR-T a Uresa. “Iniciamos la terapia CAR-T como parte de un programa de acceso extendido para pacientes gravemente enfermos”, explica el Dr. Krickau.
Con información de WebConsultas