El Gobierno de Cuba suspendió todas las actividades estatales «no imprescindibles», incluidas las escuelas, hasta el miércoles por el apagón masivo que sufre la isla y la inminente llegada del huracán Óscar a su extremo nororiental.
El Ejecutivo cubano informó de la medida en una nota y significa la prolongación de la que se anunció el jueves para el viernes por el recrudecimiento de la crisis energética.
«Ante el inminente paso del huracán Oscar por nuestro país y el período de recuperación posterior a este, así como los trabajos que se acometen para el restablecimiento del sistema eléctrico nacional, se ha decidido suspender las actividades administrativas no imprescindibles y las docentes, los días lunes 21, martes 22 y miércoles 23 de octubre», informa el comunicado.
El Gobierno cubano agregó que se mantienen operativos los servicios vitales para la población, incluidos hospitales.
Los trabajadores movilizados ante estas circunstancias recibirán «el pago de su salario promedio» y los que por esta suspensión no asisten al trabajo, cobrarán «el pago de una garantía salarial equivalente al salario escala del cargo que ocupan», explicó la nota.
El pasado viernes Cuba paralizó toda la actividad laboral estatal no imprescindible y las clases en todos los niveles de enseñanza como parte de las medidas anunciadas para atajar la crisis energética.
Ese mismo viernes el Sistema Electroenergético Nacional (SEN) sufrió un colapso completo, dejando al país en un apagón total del que apenas se está empezando a salir este domingo, más de 48 horas después, y de forma muy limitada y gradual.
A ello se suma la proximidad del huracán Oscar, que está previsto que tome tierra esta tarde-noche por las provincias de Guantánamo y Holguín (extremo oriental), de acuerdo a los informes del Instituto de Meteorología (Insmet). Las autoridades han decretado la alerta ciclónica para la región.
EFE