Turquía atacó el jueves por segundo día consecutivo presuntos objetivos de insurgentes kurdos en Siria e Irak, tras un atentado en las instalaciones de una importante compañía de defensa en Ankara en el que fallecieron al menos cinco personas, reportó la agencia estatal de noticias.
La Organización Nacional de Inteligencia atacó numerosas “ubicaciones estratégicas” empleadas por el Partido de los Trabajadores del Kurdistán, o PKK, o por la milicia kurda siria afiliada a los insurgentes, informó Anadolu. Entre los objetivos había instalaciones militares, de inteligencia, energéticas e infraestructura, además de depósitos de armas, añadió. Un funcionario de seguridad dijo que en el operativo del jueves se emplearon aviones no tripulados armados.
En la víspera, la Fuerza Aérea turca llevó a cabo ataques similares contra objetivos en el norte de Siria e Irak, horas después de que funcionarios de Ankara culparon al PKK del letal asalto a la sede de la empresa aeroespacial y de defensa TUSAS. La campaña aérea destruyó más de 30 objetivos, explicó el Ministerio de Defensa.