Los países productores de petróleo de la OPEP+ renovaron el jueves su objetivo de abrir más el grifo durante el verano, pero el aumento del bombeo será insuficiente para frenar el alza de los precios debido a la guerra en Ucrania.
Los representantes de los 23 países acordaron que “la producción de agosto se ajustará al alza en 648.000 barriles diarios”, al igual que en julio, frente a los 432.000 barriles fijados en meses anteriores, anunció la alianza en un comunicado, citó AFP.
El cartel de países petroleros sigue así el objetivo acordado en junio de elevar el bombeo diario.
Hasta ahora y desde la primavera de 2021, el grupo se había limitado a aumentar de manera moderada sus cuotas de producción para regresar gradualmente a los niveles prepandémicos.
“Teatro político”
Sin embargo, los esfuerzos realizados no son suficientes para compensar la escasez de petróleo debido al embargo acordado por Estados Unidos y la Unión Europea (UE) al oro negro de Rusia.
Desde el inicio de la guerra en Ucrania el 24 de febrero, la cotización del Brent, referencia del bruto en Europa, aumentó más de un 16%. Su homólogo estadounidense, el WTI, más de 17%.
El jueves sobre las 12H40 GMT, el Brent alcanzaba los 115,63 dólares por barril y el del WTI los 109,27 dólares, unos precios aún muy elevados.
Ante el aumento de los precios, Francia volvió a instar el lunes a los exportadores a aumentar sus volúmenes de “manera excepcional”.
El tema estará también en la agenda durante el viaje del presidente estadounidense Joe Biden a Arabia Saudita a mitades de julio.
“Es un teatro político, el viaje no terminará con un aumento significativo por encima de lo que ya ha sido acordado”, opina Edward Moya, analista para Oanda.
Incluso si la alianza decidiera ceder, “no tendría la capacidad”, añade el experto. Muchos países de la OPEP+ “están sometidos a sanciones internacionales o sufren de problemas de producción”, recuerda.
Por eso, rara vez se logran alcanzar las cuotas fijadas.
Rusia, Irán y Venezuela
En el punto de mira de Estados Unidos y de la UE desde la invasión de Ucrania, Rusia se sumó a los países a los que se les ha impuesto sanciones, como Irán y Venezuela.
Libia, por su parte, que también es miembro de la alianza, está sumida en una grave crisis política entre gobiernos rivales, que afecta a la producción petrolera, su principal fuente de ingresos.
Otros países como Nigeria, Congo o Guinea Ecuatorial figuran en el listado de malos alumnos por la falta de inversiones en el sector durante la pandemia, lo que impidió que cumplieran sus objetivos.
Pero países modelos como Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita también registran dificultades para subir los volúmenes de producción, según dijo el presidente francés, Emmanuel Macron, en la semana.
“Si esto es cierto, significa que la producción de petróleo de la OPEP+ en julio y agosto no aumentará más a pesar del reciente acuerdo”, señala Stephen Brennock, de PVM Energy.
“Los problemas de suministro seguirán siendo el principal tema de actualidad para el petróleo y los precios aumentarán aún más”, advierte por su parte Ipek Ozkardeskaya, analista de Swissquote Bank.
A menos de que los temores de una recesión provoquen una caída de los precios.