Agencias Nacionales
A cinco días para las elecciones presidenciales del 28 de julio, Nicolás Maduro, candidato a la reelección presidencial, llegó ayer, a las 8:00 pm, a la avenida Bolívar de Maracay, en el estado Aragua, donde lo esperaban miles de simpatizantes desde cerca de las 2:00 pm, para presenciar el discurso de cierre de campaña que duró cerca de una hora.
“He visitado tantas ciudades, pero jamás había visto este espectáculo en Aragua. Tengo el apoyo del pueblo aguerrido”, dijo el abanderado del Partido Socialista Unido de Venezuela y del Gran Polo Patriótico, mientras los presentes alumbraban con sus celulares.
Detalló que después de recorrer Venezuela de punta a punta está seguro que “el mapa se pondrá rojo rojito, de norte a sur, de este a oeste” el próximo domingo.
“Si ustedes quieren paz y estabilidad, voten por este pana que está aquí, por Nicolás Maduro Moros, hay 13 tarjetas, voten donde quieran, aquí cabemos todos”.
Mencionó que son cinco generaciones, “la precursora mayor de 70 años, la generación fundadora mayores de 50, la generación de oro, de 30 a 50 años y la generación más joven, que se levantó viendo guarimbas y con el desabastecimiento los muchachos de 20 a 30 años, y la generación genial, son genios los muchachos de 8, 10, 15 hasta 20 años, cinco, siete fuerzas están activadas construyendo a Venezuela”.
Ante esto volvió a lanzar una advertencia a grupos de oposición que, reiteró, estarían fraguando acciones violentas luego de los resultados.
“Le digo a la extrema derecha que ha engañado tanto, ahora están cantando fraude, solo les digo, señora demonia, señor demonio, si se comen la luz se van a arrepentir por 200 años, y esta vez no va a haber perdón, va a haber justicia, voy a defender la paz con mano de hierro, ya basta de tanto daño”.
«Venezuela ha tomado el camino correcto de la construcción de su propio modelo económico. “Tenemos que preservar la paz, la armonía, para que siga la recuperación del
*COMPROMISO DE GOBIERNO*
Aunque se trataba de un acto de campaña electoral, Maduro aprovechó para ratificar que hay que construir por lo menos 3 millones de viviendas nuevas para la misma cantidad de familias. “De los tres millones de techos dignos, ya se están levantando 400.000. Son hechos, no promesas”, subrayó.
