||Rodolfo Gamarra/Foto Cortesía
Todos los profesores y maestros y sobre todo los niños deberían estar vacunados antes del inicio de clases
Abrir las escuelas para el retorno progresivo de la comunidad educativa, es uno de los retos a los que se enfrentan las sociedades en medio de la llamada “nueva realidad”. Mientras que en otras latitudes ya los jóvenes han vuelto a las aulas, en Venezuela la fecha para iniciar el retorno está fijada a partir del próximo 25 de octubre.
Las opiniones están divididas. Mientras el Colegio de Profesores en estados como Aragua, exhortan a los representantes a no enviar a sus hijos a clases, otro grupo como los directivos de la Andiep, claman por un regreso seguro, ordenado y adaptado a cada institución.
En medio están los representantes de los alumnos, también en la disyuntiva que genera el miedo al contagio de sus hijos. Pero, pediatras y psicólogos intervienen en el debate al recordar la importancia de la socialización en el proceso de aprendizaje.
Profesionales de la salud aseguran que si se da una correcta instrucción a los niños desde los hogares, con respecto a las normas de bioseguridad, este retorno a clases será posible.
La pediatra Marisol Alvares considera de vital importancia incentivar en los niños las tres normas básicas de seguridad: lavado de manos, distanciamiento y uso correcto del tapabocas. “Estas sencillas reglas pueden y deben ser incentivadas desde el hogar, para que cuando los niños lleguen a los salones de clase sea más fácil para los maestros y responsables mantener el orden y la seguridad. En estos casos la conciencia de los padres es fundamental”.
La especialista resaltó que la principal responsabilidad viene por parte del Estado como primera medida, es decir, todos los profesores y maestros y sobre todo los niños deberían estar vacunados antes del inicio de clases. “Por supuesto, también el nucleo familiar del niño debería contar con la vacuna, solo así se puede conseguir la inmunidad de rebaño”.
¿Qué hay que hacer?
Medidas como el distanciamiento entre pupitres, controlar la cantidad de alumnos en cada salón de clases, y el número de horas que se mantendrán en el aula, son medidas que las instituciones educativas tendrán que considerar para lograr reducir los riesgos al contagio. “Los niños tienen que seguir yendo al colegio, tienen que aprender, no solamente socializar, ese enfrentamiento con la nueva realidad no se debe evitar, no solo ellos sino todos nosotros”. Alvares sugiere comenzar por enseñar a los niños a cuidarse y a cuidar de los suyos desde el hogar. “La mejor forma de enseñar es dando el ejemplo, así que los primeros en cumplir y acatar las normas deben ser los padres”. Agregó que cuando los niños regresan al hogar, es necesario estar pendiente del cambio de ropa, lavado de manos y nuevamente hacer todo esto como una rutina desde que salgan de su casa hasta que lleguen al colegio y de nuevo a la casa. Los maestros y profesores deben estar vigilantes del cumplimiento de todas estas normas durante la permanencia de los estudiantes en la institución. “Profesores, padres y representantes trabajando juntos, pueden lograr que este retorno a clases sea seguro”. |