Que Salt Lake City era la localidad preferida para albergar los Juegos Olímpicos de Invierno de 2034 era algo cantado. La sorpresa fue que el COI se inclinó ayer a favor de la candidatura de los Alpes franceses para la edición de 2030.
En procura de definir dos sedes de los Juegos de Invierno el año próximo, la comisión ejecutiva del Comité Olímpico Internacional decidió entrar en negociaciones directas con Francia y Estados Unidos por Salt Lake City.
Salt Lake 2034 no tenía rival, con lo la cita de invierno volverá a Utah tras haber albergado las justas en 2002.
La candidatura francesa, con su región alpina y Niza, ciudad en la Riviera, competía contra Suecia y Suiza. Además, el COI decidió darle el estatus de “diálogo privilegiado” a la propuesta de Suiza para los Juegos de 2038.
Ese plan podría cambiar para evitar un conflicto para los miembros del COI al tener que votar en julio próximo por la candidatura de Francia en su capital.
La victoria parcial de Francia representa todo un éxito para David Lappartient, el líder de su comité olímpico nacional y líder del ente rector del ciclismo.
Lappartient empezó a gestar un nexo cercano con el presidente del COI, Thomas Bach, desde antes del año pasado cuando se convirtió en uno de los 100 miembros del COI.
Los miembros del COI acaban ratificando todo lo que propone la comisión ejecutiva que lidera Bach. La decisión definitiva se tomará justo antes de la inauguración de los Juegos de Verano en París.
Inicialmente, Sapporo era la ciudad favorita, pero renunció el mes pasado cuando el apoyo en Japón se desplomó en medio de una investigación de sobornos en los preparativos de los Juegos de Verano en Tokio que se escenificaron en 2021.
Vancouver, la sede de los Juegos de Invierno de 2010, también renunció y Salt Lake City apuntó a 2034 para evitar que Estados Unidos fuera sede de dos justas olímpicas consecutivas tras los Juegos de Verano de 2028 en Los Ángeles.
Cuando el COI no parecía tener muchas alternativas en enero, Suecia entró en liza por novena vez para obtener la sede invernal. Suecia había perdido por última vez en 2019, cuando el COI otorgó la sede de 2026 a la candidatura italiana Milán-Cortina d’Ampezzo. Estocolmo reflotó su candidatura, pero Francia y Suiza tenían abierta la puerta.
ALTERNARÍAN LAS SEDES
El COI ha rechazado sedes para los Juegos de Invierno debido al cambio climático. El ente rector estimó que únicamente 15 países en tres continentes cumplen con los criterios para albergar al menos el 80% de los escenarios para deportes olímpicos y con las “condiciones climáticas seguras” para realizar las competencias en las próximas décadas. A largo plazo, el plan de la COI es de tener una pequeña rotación de sedes invernales.
