Tu melena recibe constantemente los daños de agentes externos, como los rayos ultravioleta del sol (UVA y UVB). Estos dañan desde la cutícula hasta la parte más interna de la hebra capilar.
Lo deja débil, seco, sin brillo, quebradizo y con horquetillas, afectando por igual al cabello natural, decolorado o con tintes químicos. Para que no te preocupes más, aquí te dejamos varios consejos de cómo preparar tu cabello para cuando llegue la hora de tomar sol.
Cuida tu melena
Champú
De igual manera que cuidamos y seleccionamos los alimentos que vamos a consumir para mantener un cuerpo saludable, de igual forma debemos seleccionar un buen champú. Debe mantenerlo sano para esos días de mucho calor, procurando limpiarlo y acondicionarlo con productos libres de parabenos, sulfatos y clorinas. También, conservantes colocados en el producto para su mayor durabilidad, evitar agentes contaminantes y usar aquellos que contengan agentes hidratantes.
Corte
Antes de tomar cualquier medida para cuidar tu melena, lo primero que debes realizar es un buen corte de cabello. No le temas a cortarlo un poco más de lo normal. Eso te dará un nuevo look en tus vacaciones y al mismo tiempo eliminarás todas las imperfecciones, puntas quebradizas o cabello reseco que poseas. De esta manera te aseguras que el tratamiento que elijas usar para cuidarlo podrá ser absorbido de una manera más rápida obteniendo mayores y mejores resultados.
Keratina
Productos como la keratina, el colágeno o botox cosmético son tratamientos de larga duración y pueden ser tus grandes aliados a la hora de proteger tu cabello. Estos recubren la cutícula y la sellan, evitando así que absorba la sal del agua de mar, los agentes purificadores de las piscinas, e incluso del viento. Pero sí maltratan resecando el cabello. Al mismo tiempo aplacará el frizz, lo que te evitará el uso de secadores o planchas que solo te dañarán y secarán el pelo.
Tintes en tu melena
Es importante no decolorarlo o colocar tintes –permanentes o no-, al menos un mes antes de la toma de sol. Las altas temperaturas, el agua, los rayos UVA, UVB y el cloro, harán cambios en la tonalidad que tenga tu cabellera. De tener que teñirlo te recomendamos hacerlo con un tinte libre de peróxido.
Según la Academia Americana de Dermatología, el pelo naturalmente oscuro podría cambiar a una tonalidad rojiza. Mientras que aquellos que poseen algún tinte, podrían obtener el efecto de un cabello amarillento, opaco y decolorado.
Consume Vitamina C y E
Estas vitaminas mejoran el flujo de sangre al cuero cabelludo, lo que permite que le llegue mejor los diferentes nutrientes. Además de ser un gran antioxidante que nos protegerá la cabellera de los daños de los radicales libres. También, mejoran el crecimiento del cabello, combaten la caspa, previenen la caída del cabello, hacen que crezca más grueso y previenen los trastornos del pelo que dañan en folículo piloso. Como al mismo tiempo combaten la alopecia, la calvicie, y como si fuera poco, mantienen el color natural de tu cabello.
Hidrátalo
Una vez que ya tengas todos los pasos anteriores controlados, el cierre con broche de oro para tener un cabello saludable y radiante es mantenerlo hidratado. Lo puedes conseguir con diferentes productos para el cabello. O simplemente aplicarte en el pelo una cantidad de aceite de oliva o de almendras de la mitad de tu cabello hacia las puntas una vez a la semana. Dejarlo actuar 20 minutos y quita con tu champú de preferencia y abundante agua.
Con información de Diario 2001