19.9 C
Maracay
sábado 14, diciembre 2024

VIVE LA NOTICIA A TRAVÉS DEL DIARIO LÍDER DEL ESTADO ARAGUA Y LA REGIÓN CENTRAL DEL PAÍS

Lo que no sabías de la infusión de sábila

|| Redacción El Periodiquito

El té de sábila es una bebida reconfortante y fácil de preparar que mantiene las numerosas propiedades saludables de esta planta. Antioxidantes, vitaminas y otros compuestos beneficiosos se combinan en una taza de líquido caliente con efectos positivos para la salud.

El Aloe vera, también conocido como sábila, es el nombre de una planta suculenta con amplio uso medicinal. Rica en polifenoles y con numerosas propiedades curativas, ha llevado a que se la utilice de diversas maneras para promover la salud y proteger el cuerpo del daño celular.

Beber esta planta en infusiones es una manera sencilla de aprovechar sus propiedades. Descubre los numerosos beneficios de tomar té de Aloe vera, aprende cómo puedes prepararlo y encuentra algunas recomendaciones sobre su consumo para mejorar tu bienestar general.

El té de Aloe vera es una opción popular entre aquellos que buscan mejorar su bienestar de manera natural. Estos son algunos de sus beneficios para la salud:

1. Promueve la pérdida de peso: Beber y llenar el estómago con líquido provocaría un efecto de saciedad que ayuda a sentirse más lleno y no tener tanta hambre.

2. Depura el organismo: Tomar una infusión de aloe vera ayuda a los órganos encargados de la depuración a funcionar mejor.

3. Promueve una buena hidratación: El alto contenido de agua en el té de sábila ayuda a mantener una adecuada hidratación corporal.

4. Favorece la salud bucal: Consumir o enjuagar la boca con té puede ayudar a reducir la inflamación de las encías y prevenir problemas como la gingivitis.

5. Proporciona vitaminas y minerales esenciales: El aloe vera o sábila es fuente de vitaminas A, B, C y E y de minerales como magnesio, zinc, calcio, sodio, potasio y hierro.

6. Reduce la inflamación en el cuerpo: Sus componentes antinflamatorios pueden ser beneficiosos para personas con enfermedades inflamatorias crónicas como la artritis.

7. Beneficia la salud de la piel: Sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes pueden ayudar a reducir las arrugas, el envejecimiento prematuro y problemas como el acné y la psoriasis.

8. Cuida la salud cardiovascular: Aunque son necesarios más estudios, el gel de sábila favorecería la salud cardiovascular en general, ya que contribuiría a regular la presión arterial, controlar los niveles de colesterol en sangre y prevenir la ateroesclerosis.

9. Fortalece el sistema inmunológico: Gracias a su contenido de antioxidantes y vitaminas, el té de sábila ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, aumentando la resistencia del cuerpo a infecciones y enfermedades comunes como resfriados y gripe.

10. Regula los niveles de azúcar en sangre: Aunque son necesarios más estudios, el consumo de Aloe vera ayudaría a reducir los niveles de azúcar en sangre, lo puede ser beneficioso para personas con diabetes y prediabetes.

11. Mejora la digestión: Esta infusión es ideal para quienes sufren de gases, ardor o hinchazón. Sus propiedades antinflamatorias y laxantes ayudan a normalizar el proceso digestivo, prevenir el estreñimiento y aliviar los síntomas del síndrome del intestino irritable (SII).

El té de sábila es una bebida versátil y beneficiosa que puede integrarse con facilidad en la dieta diaria para mejorar la salud y el bienestar general.

Para aprovechar las propiedades del té de sábila, se debe consumir con moderación y prestar atención a los beneficios y a los efectos adversos. Comienza bebiendo una pequeña cantidad para evaluar cómo lo tolera tu cuerpo. Esto es importante cuando introduces un nuevo elemento a tu dieta.

Se recomienda beber una taza de té de sábila al día. Consumir más de esta cantidad no necesariamente aportará más beneficios y podría causar efectos adversos.
Además, es aconsejable consumir el té de Aloe vera durante un máximo de dos semanas continuas. Después de este período, es conveniente hacer una pausa para evitar posibles efectos secundarios, evaluar sus efectos y permitir que el cuerpo se ajuste.
Beber demasiado té de sábila puede tener efectos laxantes, causando deshidratación y desequilibrios electrolíticos. Si experimentas síntomas gastrointestinales, considera reducir la frecuencia a cada dos o tres días o suspender su ingesta.
Dialoga sobre el consumo de Aloe vera con tu médico, en especial si tienes condiciones de salud preexistentes o estás tomando otros medicamentos. Siempre es recomendable consultar a un profesional de la salud antes de realizar cambios en la dieta.
¿Cómo usar la sábila para preparar té?
El aloe vera está disponible en la naturaleza. Contar con una planta y poder tomar el gel fresco de una hoja es la manera más simple y económica de aprovechar sus propiedades.

Para preparar el té de sábila deberás extraer la sustancia gelatinosa que contiene el interior de la hoja. Para aprovecharlo podrás licuarlo, triturarlo, batirlo o cortarlo en cubos y añadirlo a la infusión.

También puedes obtener el jugo comercializado en las tiendas naturistas. En estos casos, solo tendrás que añadir el contenido de estas botellas a tu bebida caliente habitual.

Algunas de estas presentaciones listas corren el riesgo de contener una cantidad baja de sábila y estar cargado de azúcares o conservantes. Si eliges comprar el preparado deberás acudir a tiendas especializadas y asegurarte de buscar una marca confiable que contenga 99 % de aloe vera.

Ingredientes
250 ml de agua.
1 cucharada de gel de sábila.
Miel o limón al gusto (opcional)
Instrucciones
Lava bien la hoja de sábila, quita las espinas y retira la cáscara.
Retira los trozos de gel transparente con una cuchara, lávalos bien y apártalos en un bol. Asegúrate de retirar la sustancia amarillenta que tiene alrededor, pues este compuesto puede resultar tóxico si se consume en grandes cantidades.
Hierve el agua en una olla.
Agrega el gel de sábila al agua hirviendo y cocina a fuego lento durante unos minutos.
Revuelve para que el gel se disuelva.
Cuela el té para eliminar residuos sólidos y sirve.
Puedes añadir miel o limón al gusto para mejorar el sabor.
Deja reposar cinco minutos y disfruta.
Calcula aproximadamente una cucharada de gel de aloe vera por cada taza de agua que desees preparar.
Infusión de jengibre y sábila
La infusión de jengibre y aloe vera es una combinación que puede aportar beneficios para el tránsito intestinal y la inflamación abdominal. Esta mezcla aprovecha las propiedades antiinflamatorias.

Ingredientes
1 taza de agua.
1/2 cucharadita de jengibre rallado.
1 cucharada de pulpa transparente de una hoja de aloe vera.
Preparación
Mezcla todos los ingredientes en una olla y cocina a fuego lento durante 15 minutos.
Retira del fuego y deja reposar durante 10 minutos.
Cuela el té y disfruta esta infusión en tu taza preferida.
Áloe vera y té verde
Otra buena opción para tomar sábila es combinarlo con té verde. Ingerir esta infusión en ayunas podría ayudarte a adelgazar, mejorar el tránsito intestinal y tener más energía al inicio de tu jornada.

Ingredientes
1 taza de agua caliente.
Pulpa de sábila triturada.
Té verde en bolsita, a granel o en polvo.
Procedimiento
Prepara el té verde mezclando este ingrediente con el agua caliente.
Agrega los trozos de la pulpa de sábila.
Deja que repose unos 3 minutos y ya podrás tomarlo.
También puedes refrigerar esta infusión y beberla como un té helado.
Posibles efectos secundarios
En general, tomar un poco de té hecho con el gel transparente de sábila suele ser seguro. Pero su consumo excesivo puede causar los siguientes efectos secundarios:

Diarrea.
Deshidratación.
Náuseas y vómitos.
Calambres abdominales.
Hipersensibilidad y reacciones alérgicas.
Por otra parte, el consumo del látex, que es la sustancia amarilla o amarronada ubicada bajo la piel de las hojas, puede ser peligroso. Este componente tiene propiedades laxantes y puede causar efectos adversos severos, como insuficiencia renal aguda, hepatitis tóxica y, en dosis elevadas, podría aumentar el riesgo de cáncer.

Contraindicaciones
Aunque beneficioso para muchos, el té de aloe vera no es adecuado para todas las personas. Aquellos que deben evitar su consumo incluyen:

Niños pequeños.
Personas con enfermedades renales.
Pacientes con enfermedades cardíacas.
Mujeres embarazadas o en período de lactancia.
Personas que siguen un tratamiento con fármacos, como anticoagulantes, antidiabéticos orales, laxantes o diuréticos.

 

- Advertisement -spot_img

ARTÍCULOS RECIENTES

error: Content is protected !!