Los tratamientos naturales para la mala circulación son el uso de tés diuréticos, como té verde o té de perejil, beber más líquidos durante el día o disminuir el consumo de sal. Asimismo, una de las mejores formas de aliviar la mala circulación es simplemente mover las piernas y los brazos durante el día, con el objetivo de facilitar la circulación de la sangre y evitar la acumulación de líquidos que pueden causar hinchazón.
La mala circulación puede surgir por un proceso natural de envejecimiento del cuerpo, pero también puede ocurrir por afecciones como la enfermedad arterial periférica, diabetes, obesidad o tabaquismo, pudiendo tener como principales síntomas hinchazón de las piernas; manos y pies fríos, y calambres, por ejemplo. Conozca otros síntomas de la mala circulación.
Entre las opciones de tratamiento natural para la mala circulación se incluyen las siguientes:
1. Tomar té diurético
Los tés diuréticos como el té verde, el té de perejil o el té de cola de caballo, por ejemplo, poseen propiedades diuréticas naturales y sustancias como flavonoides, minerales, como el potasio, y cafeína, que tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, lo que mejora la mala circulación y ayuda a eliminar el exceso de líquido que causa hinchazón de las manos, las piernas y los pies, por ejemplo.
Para obtener los beneficios de los tés diuréticos, se debe escoger uno de los tés y beberlo a lo largo del día.
2. Disminuir el consumo de sal
La ingesta de grandes cantidades de sal en la alimentación puede dificultar la circulación sanguínea, pues la sal contiene mucho sodio, el cual retiene el agua, por lo que si se posee en grandes cantidades en el cuerpo, aumenta la retención de líquidos, ocasionando el surgimiento de hinchazón en las piernas, los pies, los tobillos, los brazos y las manos.
3. Usar pimienta de cayena
Una excelente estrategia para mejorar la mala circulación es emplear pimienta de cayena, conocida también como chile en polvo o pimienta roja, que es rica en capsaicina, una sustancia que mejora el flujo sanguíneo hacia los tejidos, reduce la presión sanguínea y estimula la liberación de óxido nítrico, responsable por dilatar los vasos sanguíneos, lo que hace que la sangre fluya de forma más fácil por las venas y arterias.
Ciertos estudios muestran que el aumento de la ingesta de pimienta de cayena mejora la circulación y la resistencia de los vasos sanguíneos y, además, reduce la acumulación de placas de grasa en las arterias.
Una buena forma de usar la pimienta de cayena es añadir una pizca en un litro de agua e ir bebiendo durante el día, teniendo cuidado de no colocarla en exceso, pues la bebida puede quedar muy picante. Otra opción es adicionar 1 cucharadita de pimienta de cayena en polvo en 1 litro de aceite de oliva y usar esta mezcla para aderezar ensaladas.
4. Beber más líquidos
La ingesta de líquidos durante el día puede ayudar a mejorar y a prevenir la mala circulación, pues cuando el cuerpo no está lo suficientemente hidratado, la sangre no circula de forma adecuada, pudiendo causar retención de líquidos e hinchazón de las piernas, los pies o las manos.
Por esta razón, es importante tomar al menos de 8 a 10 vasos de agua al día o jugo con frutas que ayuden a mejorar la circulación sanguínea.
5. Comer más vegetales de color verde oscuro
Los vegetales de color verde oscuro, como espinaca, berro, cilantro, perejil y col forrajera, son ricos en nitratos, una sustancia que es transformada en óxido nítrico en el cuerpo y que actúa dilatando los vasos sanguíneos, permitiendo que la sangre fluya de forma más fácil, lo que contribuye a combatir la mala circulación.
Por esta razón, se debe consumir vegetales de color verde oscuro todos los días en ensaladas, jugos o sopas, por ejemplo.
6. Consumir más frutas cítricas
Las frutas cítricas como naranja, limón y toronja son ricas en vitamina C y flavonoides, que son poderosos antioxidantes que ayudan a mejorar la mala circulación, debido a que reducen los daños en los vasos sanguíneos causados por los radicales libres; disminuyen la presión sanguínea y la rigidez de las arterias, y mejoran el flujo sanguíneo y la producción de óxido nítrico responsable por la relajación de los vasos sanguíneos.
Lo ideal es consumir todos los días al menos dos tipos de frutas cítricas frescas o en jugos y batidos.
7. Incluir alimentos ricos en agua
Los alimentos ricos en agua ayudan a mantener hidratado el organismo y mejorar la circulación sanguínea, además de promover la diuresis en el organismo para eliminar el exceso de líquido retenido. Estos alimentos son el rábano, la sandía, el tomate, el nabo y la piña, por ejemplo.