El gobierno del presidente Joe Biden autorizó transacciones “esenciales” entre la compañía estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) y cuatro empresas estadounidenses, informó este viernes el Departamento del Tesoro.
Washington aplica una batería de sanciones a Venezuela tras la reelección en 2018 de Nicolás Maduro, que considera “fraudulenta”. Estas medidas incluyen, desde 2019, la prohibición de comercializar petróleo venezolano.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), dependiente del Departamento del Tesoro, ha emitido la licencia general 8N que autoriza a Halliburton, Schlumberger Limited, Baker Hughes Holdings LLC y Weatherford International a realizar transacciones con PDVSA “necesarias para el mantenimiento limitado de operaciones esenciales en Venezuela” o su “liquidación progresiva”.
La nueva licencia entra en vigor viernes este hasta noviembre y reemplaza a otra similar emitida hace casi seis meses.
Entre las operaciones permitidas con las cuatro empresas se incluyen las necesarias para garantizar la seguridad del personal, la participación en reuniones de accionistas, los pagos de facturas de terceros por actividades autorizadas, el abono de impuestos locales y de salarios a empleados y contratistas, así como la compra de servicios públicos.
En el texto la OFAC precisa que sigue prohibiendo la perforación, procesamiento, compraventa y transporte “de cualquier petróleo o productos derivados del petróleo de origen venezolano”.
Tampoco permite diseñar, construir, instalar, reparar o mejorar pozos u otras instalaciones “excepto cuando sea necesario por motivos de seguridad”, ni contratar personal o servicios adicionales o el pago de dividendos a PDVSA.
Veta asimismo la exportación de diluyentes y la concesión de préstamos o subsidios a la petrolera venezolana.