El archipiélago español de las Canarias se prepara para la previsible llegada al mar este lunes por la lava que emana del nuevo volcán que el domingo entró en erupción, ante la posibilidad de que genere explosiones y emisiones de gases nocivos.
Frente a ello se intensifica el dispositivo de seguridad y se sucede la adopción de medidas, como el establecimiento de un perímetro de exclusión por mar o controles por parte de las fuerzas de seguridad para impedir el acceso por tierra a la zona afectada. Hasta el momento, los núcleos más vulnerables por el avance de la lava son El Paraíso y Todoque.
Y en su camino hacia el mar las coladas han arrasado casas, caminos e infraestructuras y han obligado hasta el momento a la evacuación de unas 5.500 personas, después de que este lunes se haya procedido a desalojar a cuarenta viviendas en Tazacorte, según el Plan Especial de Emergencias por Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca). Además, se mantiene activa la alerta por incendios forestales.
Con información de Unión Radio