La Fiscalía ha pedido este lunes 20 años de prisión, la pena máxima en Francia por el delito de violación, para Dominique Pelicot, por haber abusado durante 10 años de su esposa, a la que drogaba con somníferos y ofreció a 50 hombres para que también abusaran de ella.
La fiscal del Tribunal de Apelación de Aviñón (sureste de Francia) Laure Chabaud ha pedido esa pena máxima «con la mayor convicción», y lo ha justificado en la psicología de Dominique Pelicot, al que ha descrito como un hombre perverso, egocéntrico, perturbado, con múltiples desviaciones sexuales que quiso satisfacer sus deseos sin poner «ningún límite» y sin el consentimiento de la víctima.
Tras once semanas de juicio, los fiscales han presentado sus primeros alegatos contra el principal acusado, si bien hay un total de 51 hombres imputados. Así, han lamentado que “los excesos de Pelicot no van dirigidos únicamente a su mujer” y han matizado que su figura supone la “piedra angular” del caso.
Es por ello que la fiscal general, Laure Chabaud, ha solicitado la pena máxima contra Pelicot por las «violaciones agravadas» perpetradas contra su ahora exmujer, Gisèle Pelicot, durante una década. «Veinte años es mucho, porque veinte años viviendo entre las cuatro paredes de una prisión es mucho, pero al mismo tiempo no es nada, es demasiado poco dada la gravedad de los actos cometidos, que se repetían», ha expresado Chabaud.
El Ministerio Público ha recordado, además, que hay 20.000 documentos visuales grabados por el principal acusado que ponen en evidencia la «extrema violencia de los crímenes».
“Por ello, solicito con la mayor convicción una pena de 20 años de reclusión”, ha declarado de forma solemne, según informaciones del diario francés Le Figaro. Los fiscales han hallado tres circunstancias principales que constituyen agravantes: el hecho de que las violaciones fueran cometidas en grupo, con la implicación del cónyuge y bajo sumisión química.
A esto se le suman otros delitos como la distribución de imágenes sexuales de una de sus hijas y de dos de sus hijastras. La fiscal ha asegurado que Pelicot «sabía lo que hacía» y que sus actos no respondían a «un impulso». «Está acusado de violaciones pero también de otros delitos relacionados con este, en particular contra su hija y sus hijastras», ha recalcado Chabaud.
No obstante, aunque Pelicot ha admitido «ser un violador como todos los acusados», sí ha seguido negando los cargos relacionados con su hija, un caso para el que la Fiscalía carece de pruebas suficientes.
«No minimizamos su sufrimiento, tan legítimo, pero no hemos hallado una traducción jurídica«, ha aseverado la fiscal en relación a Caroline. Sin embargo, ha defendido que estos hechos solo demuestran que existía «un comportamiento criminal que se alargó durante décadas».
Dominique Pelicot fue detenido en septiembre de 2020 por grabar bajo las faldas de unas mujeres en un supermercado. Al registrar sus archivos informáticos los investigadores descubrieron miles de vídeos y fotos en los que aparecían las violaciones a las que sometió a Gisèle.
El principal acusado está también imputado en otros dos casos de violencia de género, uno por la violación y el asesinato de una mujer en 1991 y el otro por una tentativa de violación con arma blanca en 1999.