Más de 86.000 hectáreas de bosques se han visto afectadas en Colombia por incendios causados por manos criminales y la temporada seca, especialmente en la Orinoquía y la Amazonía, afectando la calidad del aire de ciudades como Bogotá.
La Unidad Nacional para la Gestión de Riesgo de Desastres (UNGRD) informó este sábado que, según el más reciente reporte de la Sala de Crisis Nacional, desde el 16 de diciembre y hasta el 4 de febrero se han atendido 301 incendios forestales en 142 municipios situados en 20 de los 32 departamentos del país.
De estas 301 conflagraciones, según un comunicado de la Unidad, 291 han sido sofocadas por el trabajo de los bomberos y el Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (SNGRD). El ministro del Interior, Daniel Palacios, dijo en una declaración a medios que la mayor cantidad de incendios se han registrado en la región de la Amazonía, con 173.
Explicó que los incendios se han incrementado por la acción de grupos criminales “que operan en esta zona del país”.
Debido a la contaminación del aire que ha sufrido Bogotá en la última semana, producto de los vientos cargados de material particulado, arrastrados de la región del Guaviare y la Orinoquía, las autoridades de Bogotá estudian tomar medidas que, incluso pueden llegar hasta declarar la alerta ambiental.
Con información de La Patilla