Naasón Joaquín García, líder de la iglesia mexicana La Luz del Mundo, desistió de sus vehementes afirmaciones de que no había abusado sexualmente de niñas y se declaró culpable, dijeron fiscales estatales de California, cuando solo faltaban unos días para que iniciara su juicio.
García, de 53 años, se declaró culpable en la Corte Superior de Los Ángeles de dos cargos de cópula oral forzada que involucran a menores de edad y un cargo de un acto lascivo contra una niña que tenía 15 años.
El lunes iba a comenzar su juicio por cargos que incluyen violación infantil y tráfico humano para producir pornografía infantil.
García se valió de su influencia espiritual para tener relaciones sexuales con varias feligresas, dijeron los fiscales. La Iglesia que encabeza fue fundada por su abuelo y tiene 5 millones de seguidores en todo el mundo.
“García utilizó su poder para aprovecharse de niñas”, señaló el procurador Rob Bonta en un comunicado. “Se apoyaba en los que lo rodeaban para preparar a feligresas con el propósito de cometer abusos sexuales. La declaratoria de culpabilidad de hoy nunca podrá deshacer el daño, pero ayudará a proteger a generaciones futuras”.
El hecho de que se haya declarado culpable es un cambio abrupto de posición con respecto a los desmentidos de sus abogados y el ferviente apoyo que le ha dado su Iglesia, la cual tiene su sede en la ciudad de Guadalajara.
La Iglesia y los abogados de García no hicieron comentarios por el momento sobre la declaratoria de culpabilidad.
La sentencia estaba programada para dictarse el miércoles. García sigue encarcelado y se le ha fijado una fianza de 90 millones de dólares.
Desde que fue arrestado en 2019, el líder eclesiástico ya enfrentaba otro obstáculo en el juicio. Una de sus coacusadas, Alondra Ocampo, una feligrés que ya se declaró culpable y reconoció que facilitó y participó en los abusos, iba a testificar en contra de él.
El abogado Fred Thiagarajah, que representa a la exlíder del grupo juvenil de la Iglesia, dijo que Ocampo sería la testigo estelar que podría corroborar el testimonio de víctimas y proporcionar contexto para los argumentos de la fiscalía.
“Ella reclutaba activamente a niñas y las preparaba para él”, dijo Thiagarajah. “Ella elegía niñas y las traía al círculo íntimo de él. Su tarea era sexualizar a estas niñas y facilitar que se abusara de ellas”.
Ocampo les decía a las niñas que, si rechazaban los deseos del “apóstol”, actuaban en contra de Dios, según los cargos.
Las alentaba a vestir ropa provocativa y bailar para García, que entonces “les daba un discurso acerca de un rey que tenía amantes y afirmaba que un apóstol de Dios nunca puede ser juzgado por sus actos”, según señalan los cargos.
Ocampo les dijo a tres niñas que García se sentiría complacido de recibir autorretratos de ellas desnudas e incluso orquestó sesiones de fotos pornográficas en las que ellas aparecían tocándose entre sí, y les dijo que serían enviadas al líder de la Iglesia.
García les dio las gracias a las niñas por las fotos, según documentos judiciales.
Otra coacusada que fue integrante de la Iglesia, Susana Medina Oaxaca, se declaró culpable el viernes de agresión con probabilidad de causar graves lesiones corporales.