Colombia declaró sus primeros casos en el país de la viruela del mono. Se trata de tres hombres adultos: dos han sido detectados en Bogotá después de un viaje a Europa y uno fue localizado en Medellín. Así lo comunicó la directora de Epidemiología y Demografía del Ministerio de Salud, Claudia Cuéllar en un tuit.
Los afectados fueron aislados y empezaron a ser tratados mientras se rastrean posibles contactos. “Las manifestaciones de la viruela símica suelen incluir fiebre, dolor de cabeza intenso, dolores musculares, dolor de espalda, poca energía, ganglios linfáticos, inflamados y una erupción cutánea o lesiones maculopapulosas (protuberancias blandas y pequeñas en la piel)”, explicó Cuéllar.
Además, desde el Ministerio recordaron que esta viruela solo se transmite por contagio directo entre personas y que no se propaga por el aire, el agua o los alimentos. Cuéllar ha hecho un llamado a que estos reportes no generen alarma ni pánico entre la población al tiempo que ha invitado a estar vigilantes ante posibles casos sospechosos.
La viruela del mono mantiene en alerta al mundo, después de que fueran detectados más de 3.525 casos en 43 países. Reino Unido, España y Alemania son por ahora los que han reportado más casos de esta enfermedad.
Los síntomas, que permanecen entre dos o tres semanas, comienzan con fiebre, dolor de cabeza, inflamación de ganglios y malestar muscular. En una segunda etapa comienzan los sarpullidos en la piel, primero en la cara y después en el resto del cuerpo. Este es el momento en el que más posibilidades hay de contagio, pues este se produce muchas veces al contacto físico con estos sarpullidos. Es por esto que, aunque no es estrictamente una enfermedad de transmisión sexual, es precisamente durante este tipo de encuentros cuando más posibilidades hay de contraer la enfermedad en caso de contacto con alguien infectado.
Dicen los científicos por otra parte que se trata de una enfermedad similar a la viruela común, pero de menor relevancia clínica. “Ante la presentación de alguno de estos síntomas, y si estuvo en contacto con un caso sospechoso, hay que llamar a la EPS o acudir al centro de salud más cercano”, advirtió Cuéllar.
Las medidas de prevención son ya viejas conocidas en todo el mundo debido a la pandemia del coronavirus. Se recomienda el lavado frecuente de manos, cubrirse nariz y boca con el codo al toser y estornudar y evitar compartir alimentos, bebidas, cubiertos y platos. Como el riesgo se incrementa en contacto directo con el enfermo, es muy útil usar mascarilla en estos casos y reforzar las medidas de higiene. Y lo más importante: nunca, bajo ningún concepto, se deben tocar directamente las erupciones cutáneas del paciente.
El director de vigilancia en Salud Pública del Instituto Nacional de Salud, Franklyn Prieto, aseguró que desde el pasado 19 de mayo que la institución dio lineamientos a los servicios de salud para estar alerta. “Se mantiene la indicación de revisar signos de viruela símica en personas con nexo epidemiológico con un caso confirmado o probable, o con antecedente de desplazamiento a ciudades en donde se han confirmado brotes, como con antecedente de viaje a zonas endémicas (África)”, aseguró.
Por ahora, no hay vacunas contra esta enfermedad, aunque los expertos confían en la contención mundial de un brote que, por otro lado, tiene una tasa de letalidad baja con respecto a otras enfermedades: el 10%. En 50 años, ningún brote registró tasas mayores a esa.
El comité de emergencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS) celebró este jueves en Ginebra una reunión para evaluar si el brote de viruela del mono constituye una “emergencia de salud pública de importancia internacional”. Este es el máximo nivel de alerta que puede declarar el organismo, una consideración que actualmente tienen el coronavirus y la polio.
La declaración de la emergencia internacional pretende incrementar la coordinación entre los países y reforzar los mecanismos para la búsqueda activa de casos y la implementación internacional de medidas que ayuden a poner freno a la circulación del virus, algo que debería concretarse en las próximas semanas.