El exintérprete del astro de los Dodgers de Los Ángeles, Shohei Ohtani, se declaró ayer no culpable por fraude bancario y fiscal, una formalidad previo al acuerdo que ha negociado con los fiscales federales dentro de un vasto caso de apuestas deportivas.
La fiscalía asegura que Ippei Mizuhara le robó a Ohtani casi 17 millones de dólares para pagar deudas, algo que transcurrió durante varios años, y en ocasiones llegó a suplantar al pelotero japonés ante los banqueros y explotó su relación personal y profesional con la estrella.
Mizuhara llegó a un acuerdo el 5 de mayo para aceptar su culpabilidad en el que se detallaron las denuncias, y que fue anunciado por los fiscales varios días después.
Durante su audiencia de cargos ayer en una corte federal de Los Ángeles, la jueza Jean P. Rosenbluth pidió a Mizuhara que respondiera a un cargo por fraude bancario y otro por suscribir una solicitud falsa de devolución fiscal. La declaración era un paso procesal al tramitarse el caso, por más que Mizuhara ya había llegado a un acuerdo.
El abogado defensor Michael Freedman dijo que Mizuhara se declarará culpable más adelante. En el pasillo previo a la audiencia, el abogado de Mizuhara dijo que no iban a formular comentarios.
No se permitió a la prensa ingresar a la sala principal del juzgado y debieron seguir la audiencia en otra sala.
No hay evidencia de que Ohtani participó o sabía de las apuestas de Mizuhara, y el pelotero está colaborando con los investigadores, según las autoridades.