Las almohadillas de las patas de los perros son la superficie donde el can apoya su peso. Son pequeños tejidos sin pelo que están en contacto directo con la superficie por donde se traslada el animal, por lo que amerita un cuidado especial.
Esta zona es acolchada y permite que tu perro camine suavemente, que sería el equivalente a las suelas de los zapatos. Aunque es acolchada, es una piel gruesa que contiene queratina (misma sustancia que están hechas las uñas y el pelo), lo que la hace una zona resistente y dura.
Contienen glándulas sudoríparas, lo que las mantiene siempre hidratadas y suaves. Esto evitará que tu perro tenga problemas al caminar, cosa que sí pasaría si llegasen a ponerse duras.
Debajo de las almohadillas hay una capa de grasa. Esto amortigua los movimientos de tu can evitando daños en los dedos de sus patas. Recuerda que los perros caminan apoyados de estas extremidades. Y como última función, pero no menos importante, las almohadillas servirán como aislantes térmicas de sus patas.
Cuidados de las almohadillas
Son el soporte del caminar del erro, y aunque son fuertes y resistentes, hay que tener cuidados especiales para que siempre estén en buen estado. Por presentar muchas terminaciones nerviosas, cualquier lesión será muy dolorosa para tu mascota. Aquí te contamos sus cuidados básicos.
Lo ideal es fortalecer esta zona de las patas del perro para que se fortalezcan debidamente. Para ello, y desde que tu mascota es cachorro, dale paseos por diferentes superficies como asfalto, césped o tierra. Siempre procurando no exponerlos a altas o bajas temperaturas en la superficie del piso.
Procura que el perro no se exponga por tiempos prolongado a superficies abrasivas como el asfalto o la arena de la playa. Mucha exposición podría ser contraproducente para su capa protectora. Es mejor alternar con superficies más amigables como la grama.
Revisa regularmente sus almohadillas para cerciorarte de que están bien hidratadas. Si las notas secas o agrietadas puedes lubricarlas colocando un poco de vaselina, gel de aloe vera o un poco de centella asiática. Si tu perro es mayor, pierde elasticidad su piel, por lo que deberás tener mayor cuidado.
Esto también es importante
Si estás paseando con tu perro un día de mucho sol, es muy probable que el calor del asfalto queme sus patas. Para evitarlo, procura colocarle algún tipo de protección a sus patas, los cuales los puedes adquirir en cualquier tienda de animales. Es tan simple como colocarle unas medias. Lucirás un perro fashion y protegido.
Hay perro que viven rodeados de terrenos escabrosos, los cuales los hacen propensos a cortaduras en sus almohadillas. En estos casos aplica presión en la herida utilizando una gasa y un poco de pomada. Si la herida es profunda, lo recomendable en vendarlo y llevarlo rápidamente a su veterinario.
Cuando la mascota es muy peluda, es normal que presente pelo en la zona interdigital. Recorta ese pelo en exceso ya que podrían formarse nudos, lo que podría lastimar al perro en su caminar.
Como último consejo, si a tu perro le gusta mucho el agua, procura que no pase más de 15 minutos sumergido en ella, ya que esto ablandaría sus almohadillas, pudiendo despegarse la capa superficial de la misma al caminar luego de salir del agua.
Ya sabes, con revisiones periódicas podrás mantener la salud de las almohadillas de tu perro en perfecto estado.
Con información de Diario 2001