|| Luis Chunga
*** Quienes se mantienen en el lugar perdieron sus enseres, luchan para sobrevivir mientras Los Tacarigua gana cada vez más terreno**
Los Tacarigua o Lago de Valencia ha ganado terreno en los últimos años, lo que antes eran zonas urbanas, al sur de Maracay, ahora forman parte del reservorio natural, pero hay familias que se mantienen a la espera de la ayuda gubernamental para salir de una comunidad declarada como inhabitable.
Nueve familias que permanecen al final de la avenida Mérida del sector Brisas del Lago, municipio Girardot del estado Aragua, viven en condiciones infrahumanas, no sólo porque ocupan viviendas o infraestructuras deterioradas, en medio de aguas contaminadas, sino porque lidian con culebras, babos, entre otros reptiles que representan un peligro para los más pequeños.
Reconocen que algunas familias fueron reubicadas por el gobierno hace unos años, pero el resto “quedó en el abandono”.
Camilo Palmeri habita junto a su esposa entre las ruinas de lo que fue un liceo, luego que su casa se desplomó ante el arrase de Los Tacarigua. En este lugar habilitó un pequeño espacio para la cría de ganado.
“Con el tiempo y la necesidad me fui abriendo espacio en la ganadería, como todos los vecinos se fueron comencé a criar vacas y algunas están preñadas. Estoy haciendo un pequeño establo, pero veo que las aguas continúan avanzando”.
Para Glemi Farfán, esposa de Palmeri, las autoridades dejaron “a su suerte” a las familias que siguen en la comunidad, por lo que pide ayuda para poder tener un hogar digno.
“El agua ya invadió la mayoría de las casas de la calle Lara, algunos se fueron, pero otros no tienen donde ir”.
Viven sin servicios públicos, se ingenian el día a día “para sobrevivir” en un sector que, de seguro, desaparecerá pronto, como ocurrió con el resto de los urbanismos que fueron construidos a las orillas de este reservorio natural.
Fotos Luis Chunga
