||Rodolfo Gamarra
***Hay que tener en cuenta que cada año, el mal uso de estos artificios, generan un número considerable de lesionados por quemaduras**
En Venezuela, la temporada decembrina trae consigo la tradición de utilizar fuegos artificiales como parte de las celebraciones, en especial los 24 y 31 de Navidad y Año Nuevo, respectivamente. Aunque los niños suelen disfrutar de estos pirotécnicos, es importante tener en cuenta que, a pesar de su apariencia inofensiva, cada año su incorrecta manipulación genera un número considerable de lesionados por quemaduras. Por este motivo, se hace necesario controlar y vigilar su uso, en especial cuando se trata de menores de edad.
Pedro Olivo, comandante del Cuerpo de Bomberos de Aragua, resaltó la importancia de una campaña de concienciación que lleva a cabo la institución durante el mes de diciembre, a fin de educar a la población sobre los riesgos asociados al uso de estos materiales peligrosos.
El comandante Olivo destacó el hecho de regular y concientizar sobre el empleo de pirotecnia. “Las autoridades competentes supervisan la venta de estos productos, para asegurar que solo se distribuyan a compradores autorizados”.
En este sentido, hizo hincapié en que la institución se encuentra a la orden de todas las comunidades que quieran recibir charlas sobre seguridad en este y otros temas, por lo que solo tienen que acudir a la sede y solicitar el apoyo.
Destacó que se pueden impartir estos talleres en las propias comunidades, al igual que en escuelas e instituciones públicas y privadas.
Normas y reglamentos
Reiteró que está prohibida la venta de fuegos artificiales a menores de edad, y se aplicarán sanciones a aquellos que incumplen estas normativas. Además, se establece que este tipo de material tiene que manipularse con precaución, debido a su potencial peligro.
En este sentido, Olivo señaló que el Gobierno emitió una resolución para regular la seguridad en la comercialización al detal, almacenamiento, transporte y uso de artificios pirotécnicos, en la Gaceta Oficial Nro. 39.818 del 12 de diciembre de 2011. En este documento se establece que la venta de pirotecnia es legal siempre y cuando se cumplan los reglamentos señalados.
Las personas que vendan fuegos artificiales al detal, lo almacenen o transporte, deben contar con permisos de la Dirección General de Armas y Explosivos (DAEX) y de los Cuerpos de Bomberos del municipio.
El artículo 5 de la ley establece que, para la venta, los artificios pirotécnicos, deben de estar identificados y etiquetados. Todo según las disposiciones legales y normas relacionadas con sustancias, materiales y desechos peligrosos.
El artículo 6 señala que los juegos artificiales de tubo múltiple, como tortas u otros similares, deben exhibir instrucciones para su uso.
Según el artículo 17, las ventas temporales de pirotecnia no podrán ubicarse a menos de 500 metros de: depósitos de bombonas de gas licuado de petróleo, tanques externos que almacenen líquidos combustibles e inflamables y gas.
Tampoco pueden ubicarse cerca de estaciones de servicios de gasolina, gasoil, gas natural, subestaciones generadoras de electricidad, centros asistenciales y educativos; entre otros.
Sufren las mascotas
Según médicos veterinarios, las mascotas resultan afectadas por el uso de los fuegos artificiales, ya que al tener oído y olfato, más sensibles que los seres humanos, gatos y perros sufren serios problemas nerviosos al estar expuestos al ruido de explosiones continuas. Esto genera en las mascotas altos niveles de estrés que, en casos extremos, pueden terminar por producirles la muerte.
A largo plazo, dicha situación puede influir en los animales, generar fobias a estos artefactos, lo que a su vez causa reacciones de pánico y conductas no habituales, tales como escapar y perderse, lastimarse o arremeter contra las personas.
Ante esto, es recomendable exponerlos lo menos posible a estos estímulos, y si no se puede controlar, guarecerlos en un sitio acogedor, donde se sientan protegidos del ruido mientras pasa la situación.
EXPENDIOS EN MARACAY
Huberto Fernández, encargado de una distribuidora de pirotecnia en San Agustín, Maracay, enfatizó sobre la necesidad de contar con permisos para la importación y venta de estos productos. En este sentido, aseguró que todos los distribuidores de la ciudad respetan las normativas.
Destacó que las autoridades reguladoras exigen que los importadores cumplan con los requisitos legales y que los minoristas estén autorizados para comprar estos artículos. “Si no tienen permiso no se les vende”.
Además, señaló que las importaciones se han visto reducidas por diversos factores, como las restricciones impuestas después de protestas en el país. Esta situación ha limitado el uso de pirotecnia durante la temporada.
La concienciación y la regulación estricta son claves para garantizar la seguridad de la población durante las festividades decembrinas. Con medidas preventivas adecuadas y el cumplimiento de las normativas vigentes, se puede disfrutar de los espectáculos pirotécnicos de forma segura y responsable.
Fotos: Rodolfo Gamarra/Cortesía