||Rodolfo Gamarra
En Venezuela es tradición las hallacas y el pan de jamón en época decembrina, pero lo que realmente caracteriza este tiempo son las luces, el colorido, las gaitas y en cada hogar se aparta un rincón para colocar el arbolito o el nacimiento.
El también llamado pesebre no es propio de estas tierras, sino heredado de los españoles, que algunos historiadores le atribuyen a San francisco de Asís, quien se supone lo recreó por primera vez en la ciudad de Nápoles en Italia.
Armar un pesebre en la actualidad requiere de una importante inversión económica, en Maracay diversos comercios ofrecen kit de figuras, que incluyen a los principales personajes como María, José, la mula y el buey y por su puesto el niño Dios. Algunos suman a los tres Reyes Magos.
Desde unos muy diminutos que se utilizan para adornar el escritorio en la oficina, pueden oscilar desde 1 hasta 3 dólares, solo incluyen a María, José y el Niño Jesús.
Otros pueden costar entre 10 y 20 dólares, dependiendo del material (cerámica o yeso).
Los más elaborados pueden costar desde 50 hasta 150 dólares, también varía el precio de acuerdo al tamaño.
Según Naomi Suárez, las ventas de estos nacimientos se incrementan para los primeros días de diciembre, que es cuando la gran mayoría, se dispone a instalarlo en su hogar.