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Cañeros de Los Mochis se afianzaron como el mejor club del torneo, mientras que Federales de Chiriquí aún tiene posibilidades
El campeón de México, Cañeros de Los Mochis, certificó este martes su clasificación a las semifinales de la Serie del Caribe 2023 al vencer 2-1 a su par de Panamá, Federales de Chiriquí.
Un error en el tiro del receptor Iván Herrera y la velocidad en las bases de José Cardona decidieron en el quinto inning la victoria de los mexicanos, líderes solitarios de la tabla con récord de 5-1. Cardona anotó la carrera de la diferencia por el pecado del cátcher cuando el corredor se deslizaba para robarse el tercer cojín.
El abridor Braulio Torres-Pérez fue el pitcher ganador en el Fórum de La Guaira, tras labor de cinco entradas y un tercio, con cinco hits, una carrera, cinco ponches y dos pasaportes.
Jake Sánchez se acreditó su tercer rescate en esta edición del torneo. Retiró a los tres bateadores que enfrentó.
Un error del jardinero Ariel Sandoval le había echado una mano a los Cañeros en el primer inning: Irving López, con un out, conectó hit, pero Sandoval falló en el corte al atacar mal una bola que le sobrepasó. López aprovechó para llegar a la tercera almohadilla y desde allí anotó con fly del colombiano Reynaldo Rodríguez.
El equipo panameño, que queda con marca de 2-4, empató en el cuarto capítulo, con doble productor de Johnny Santos.
No duró mucho la paridad, pues los mexicanos desnivelaron de nuevo en el quinto.
Cardona conectó imparable y avanzó a segunda con toque de sacrificio de Irving López. Salió al robo, exitoso, de tercera; pero el error de Herrera (el cuarto de los panameños en la jornada) le permitió tomar también el home.
Los itsmeños montaron un ataque peligroso en la octava entrada, aplacado por el relevista Luis Márquez. El zurdo, que subió a la lomita con un out y hombres en las esquinas, supo desenmarañar el embrollo. Y luego el cerrador Sánchez fue impecable.
MINUTO DE SILENCIO
Antes de la voz de “playball” se guardó un minuto de silencio por las víctimas del terremoto en Turquía y Siria, tragedia que ha dejado más de 7.000 muertos.