Está comprobado, que las personas que desayunan con avena, mantienen el peso dentro de límites saludables, gracias al incremento de las hormonas que controlan el apetito.
La avena está considerada dentro la categoría de los cereales, contiene calorías sin grasa por lo que no hay restricción en su consumo. Si tu cuerpo esa fallo de hierro, puedes potencializar el efecto de este mineral ingiriendo mayores cantidades de este alimento.
Un plato de avena en la mañana te dará la energía que necesitas para el día, adicional la fibra que contiene ayuda a saciar el hambre más rápido y lo mejor no dispara el azúcar en la sangre, que es el temor de algunas personas.
Los copos de avena tienen seis de los ocho aminoácidos esenciales. Si se compara con el trigo, que contiene sólo uno, o la cebada y el centeno que no tienen ninguno, de ahí la importancia de incluirlo en la dieta alimentaria.
Sigue estando en la lista de los alimentos más nutritivos, completos y equilibrados. Por esta razón se recomienda para los niños, jóvenes y personas que sufren gran desgaste físico por su actividad, como los deportistas.
Cómo aprovechar la avena
Puede suavizar la avena cruda sin cocinarla dejándola remojar durante algunas horas (dos tazas de agua por cada taza de avena), para posteriormente licuarse. Sustituye la harina común por la harina de avena, con ella se pueden hacer galletas, panquecas, panes y postres.
¿Por qué es bueno consumir el agua de avena?
Su principal propiedad es la fibra, por tal razón, el agua de avena se usa para limpiar el canal intestinal y proporcionar bienestar en el cuerpo. Lo ideal es tomarla en la mañana, en ayunas. Esta bebida brinda saciedad por horas, lo que la hace favorable para aquellas personas que mantienen una dieta.
Beneficios para la salud
1 Previene la osteoporosis.
2 Las propiedades nutritivas son muchas, además de la fibra, contiene proteínas, grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas.
3 Vitaminas E, B1 y B2. Minerales como calcio, hierro, magnesio, fósforo y potasio.
4 Es perfecta para bajar el colesterol y la presión arterial. La avena limpia las paredes de las arterias pues la fibra va “barriendo” los depósitos de grasa que se van acumulando en ellas que generan muchos problemas cardíacos.
5 Mejora el sistema digestivo gracias a la gran cantidad de aminoácidos que contiene. Estimula la producción de lecitina en el hígado, favoreciendo la depuración completa de las toxinas del organismo.
6 Permite regular el azúcar en la sangre, ya que mejora la digestión del almidón y mantiene estable la glicemia, sobre todo después de comer.
7 Durante el embarazo ayuda al desarrollo del feto y durante la lactancia, favorece la producción de leche materna además, aporta gran cantidad de vitaminas y minerales a la misma.
8 Durante el embarazo ayuda al desarrollo del feto y durante la lactancia, favorece la producción de leche materna además, aporta gran cantidad de vitaminas y minerales a la misma.
Con información de Diario 2001
