De acuerdo con un portavoz del servicio, citado por Fox News, sus agentes encontraron “pequeñas cantidades de marihuana” en dos ocasiones, en julio y septiembre de 2022. Cabe señalar que aunque la posesión de menos de dos onzas de marihuana (unos 56 gramos) no es un delito en Washington D.C., es ilegal en propiedades federales, incluida la Casa Blanca.
Al mismo tiempo, la republicana Lauren Boebert, miembro de la Cámara de Representantes del Congreso de EEUU, señaló que tras el hallazgo de la cocaína, “debería establecerse videovigilancia” en la zona donde fue encontrada.
Según sus palabras, la medida es necesaria, sobre todo teniendo en cuenta que no es la primera vez que se encuentran drogas en la Casa Blanca.
Por su parte, el principal miembro demócrata del Comité de Supervisión, Jamie Raskin, defendió las acciones del Servicio Secreto, argumentando que hacer pruebas de drogas a cientos de posibles sospechosos sería “una respuesta masivamente desproporcionada y exagerada que violaría las libertades civiles de la gente”.
Previamente, el jueves, el Servicio Secreto anunció el cierre de la investigación sobre el paquete de cocaína hallado en la Casa Blanca debido a la “falta de pruebas físicas”. Aseguró que “no se encontró ninguna grabación de cámaras de vigilancia que proporcionara pistas en la investigación o cualquier otro medio para que los investigadores identificaran quién pudo haber dejado la sustancia encontrada”. Así, “sin pruebas físicas” no se puede identificar “una persona de interés entre los cientos de individuos que pasaron por el vestíbulo”.