La Corte Suprema de Brasil declaró el pasado jueves 21 de septiembre de 2023, constitucional el derecho de las personas indígenas a las tierras que han ocupado “histórica”, “tradicionalmente” y “en forma permanente”, rechazado por empresas del campo y grupos políticos de ultraderecha.
La decisión fue adoptada por nueve votos a favor y dos en contra y rechaza el llamado “marco temporal”, que propone limitar esos derechos a las tierras que los pueblos indígenas ocupaban al 5 de octubre de 1988, cuando fue promulgada la actual Constitución brasileña.
Esa tesis -considerada inconstitucional por las personas indígenas, pues no reconoce sus derechos sobre tierras que ocupaban mucho antes de 1988 y de las que, en muchos casos, fueron expulsadas en forma violenta por colonos- sólo fue respaldada por dos de los jueces, los únicos del Tribunal con un claro perfil conservador.
Tras declararse favorable al derecho de los pueblos originarios, la Corte Suprema discutirá a partir de la semana próxima fórmulas legales para los casos de muchas personas terratenientes que ocupan -desde hace décadas- áreas reclamadas por los pueblos indígenas, aunque lo hacen bajo una dudosa legalidad.