El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), António Guterres, inauguró este martes el periodo de sesiones de la 76º Asamblea General, que este año contará con la presencia de líderes mundiales, aunque también habrá intervenciones en videoconferencia.
En su discurso el titular de la ONU presentó un resumen general de la situación mundial en el cual destacó la pandemia de la Covid-19 y los diferentes conflictos armados que se desarrollo en el mundo.
En su mensaje, Guterres destacó el esfuerzo de la organización para desarrollar una agenda de paz en el mundo, que incluye la búsqueda de soluciones de los conflictos en marcha.
Guterres también abordó la lucha contra el cambio climático y los esfuerzos que realiza Naciones Unidas para acelerar los trabajos para disminuir la emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera.
Consideró que existe una emergencia planetaria respecto a la crítica situación del clima, para lo cual pidió a las naciones más contaminantes contribuir a una mejoría en este tema.
Un punto esencial para la ONU es reducir la brecha entre los países ricos y pobres, indicó Guterres, quien destacó que los países africanos son los que más sufren por esta situación.
Llamó a la solidaridad mundial para que las naciones menos favorecidas puedan salir de la pobreza de una forma más rápida con una distribución de la riqueza más uniforme que atienda una multitud de problemas en varios rubros que atraviesan estas naciones, en particular la salud.
En su intervención, el secretario general ofreció un panorama sombrío de la situación mundial que la describió como una de las mayores crisis en cascada que se haya presenciado.
“Estoy aquí para hacer sonar la alarma (…) Nuestro mundo nunca ha estado más amenazado. O más dividido. Nos enfrentamos a la mayor cascada de crisis de nuestra vida. La pandemia del Covid-19 ha sobredimensionado las flagrantes desigualdades. La crisis climática está golpeando el planeta”, indicó.
“La agitación desde Afganistán hasta Etiopía, pasando por Yemen y más allá ha frustrado la paz – continuó – Un aumento de la desconfianza y la desinformación está polarizando a la gente y paralizando las sociedades”.
“Los derechos humanos están bajo fuego. La ciencia está siendo atacada. Y los salvavidas económicos para los más vulnerables llegan demasiado poco y demasiado tarde… si es que llegan. La solidaridad está ausente, justo cuando más la necesitamos”, remató.
Con información de Telesur