|| Agencias EFE/AFP / Foto EFE
Todas las tropas rusas que quedaban en los alrededores de Kiev y la localidad de Chernígov, en el norte de Ucrania, se han retirado de esas zonas, afirmó ayer un funcionario de alto rango del Departamento de Defensa de EE.UU.
En una llamada con periodistas, el funcionario indicó que, de acuerdo con los datos de que dispone, todos los soldados rusos desplegados en esas áreas se han replegado para dirigirse a Bielorrusia y Rusia con el fin de “reconsolidarse y reajustarse”.
“No estamos viendo fuerzas rusas dentro y alrededor de Kiev o al norte de Kiev, ni tampoco dentro o en las inmediaciones de Chernígov”, apuntó la fuente.
Mientras, EE.UU. no ha detectado “cambios reales” en la situación en el este o el sur de Ucrania.
“Mariúpol sigue aislada, pero los rusos no se la han asegurado pese a las informaciones de fuentes abiertas de lo contrario, de los ucranianos entregando Mariúpol, evaluamos que eso no ha ocurrido”, dijo el funcionario estadounidense.
MASACRARON A CIVILES
El alcalde de Mariúpol informó ayer que unos 5.000 civiles han muerto allí en el mes desde que las fuerzas rusas comenzaron a sitiar la ciudad ucraniana.
Vadym Boichenko dijo que entre los muertos habían 210 niños y que las fuerzas rusas atacaron hospitales, incluso uno donde 50 personas murieron quemadas.
Añadió que más del 90% de la infraestructura de la ciudad está destruido debido a las bombas y cañoneos rusos.
EVACUAR EL ORIENTE
Ucrania instó ayer a los habitantes del este del país a evacuar la región “ahora”, en medio de los temores de una ofensiva de gran envergadura del ejército ruso en el Donbás, actualmente objetivo prioritario del Kremlin.
Al menos cinco personas murieron por ataques rusos ayer en la región de Donetsk, en Donbás, informó el gobernador Pavlo Kyrylenko, quien exhortó a la población a evacuar hacia zonas más seguras.
Los soldados rusos también atacaron un depósito de combustible y una fábrica en la región de Dnipropetrovsk, al oeste de Donbás, indicaron las autoridades.