Abrazar un árbol se ha convertido en una terapia muy utilizada por las personas que padecen de estrés, ansiedad o simplemente se enfrentan a situaciones complicadas en su cotidianidad.
En efecto, está actividad ha calado, a tal punto que se posiciona entre una de las principales estrategias que emplean las personas cuando desean desconectarse de los factores que le agobian.
Por ende, científicamente se ha comprobado cuáles son los beneficios que aporta la naturaleza para mejorar la calidad de vida de las personas, en particular en los jóvenes y adultos mayores, quienes tienen cambios radicales con mayor frecuencia.
Tipos de arboles
Cerezo.
Almendro.
Acacia.
Ciruelo.
Nogal.
Álamo Blanco.
Pino.
Mimosa.
Madroño.
Olivo.
Higuera.
Fresno.
Gingko.
Eucalipto.
¿Cuál es el mejor árbol para abrazar?
Todos los árboles poseen beneficios a quienes se acerquen a ellos. Sin embargo, dependerá de la sensación que quieras experimentar, por ejemplo: abrazar una higuera aporta tranquilidad y ayuda a reducir la presión arterial.
Beneficios de abrazar un árbol
Ayuda a mejorar la concentración.
Reduce el nivel de estrés rápidamente.
Combate pensamientos negativos.
Aporta tranquilidad y paz a quienes sufren de depresión.
Ayuda a las personas que padecen de: Asma, bronquitis e hipertensión.
En consecuencia, la naturaleza no para de sorprender con sus aportes al ser humano y prueba de esto es la facilidad que este tiene de prácticar la arboterapia.
Cabe destacar, que continúan los estudios científicos para precisar el porcentaje de efectividad que genera abrazar un árbol y determinar cuál es la frecuencia más recomendable para realizar esta actividad, la cual no es moderna, pero ha logrado mantenerse en el transcurso de los años en cualquier parte del mundo.
Por lo tanto, se estima que pronto los especialistas en la materia ofrezcan avances de la investigación, con la finalidad de que la población que práctica esta actividad tenga más información al respecto.
Con información de D2001
