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Según representantes del sector, no hay un registro exacto del número de personas dedicadas a la confección porque la mayoría es informal
Roberto Rimeris, presidente de la Cámara Venezolana de la Industria del Vestido, informó que el 90% de las telas que se utilizan en Venezuela son importadas.
“La mayoría de las telas son importadas, tienen el beneficio del dólar barato, pero tienen el inconveniente de la logística y de los aranceles”, dijo.
Señaló que la industria de la confección utiliza un cuarto de su capacidad instalada, la cual se encuentra aproximadamente entre 20% a 27%
Rimeris también señaló que de 400 empresas afiliadas a la Cámara en el año 2000, solo quedan 20 en la actualidad, por lo tanto no son representativas en cuanto a cifras de empleos.
“Muchas empresas han desaparecido, otras han pasado al sector informal, los trabajadores que tenemos en la Cámara del Vestido son muy poquitos, sumarán 200, cuando esto ha sido un sector de 120-130 mil trabajadores hace 20-25 años”.
De esta forma confesó que no tiene un registro exacto de la cantidad de personas destinadas a la actividad de confección, “porque el sector informal es mucho más grande que el formal en estos momentos”.
Destacó que a principios de 2022, algunas fábricas empezaron a reactivarse, “porque sentían un poquito más de empuje en las ventas de enero a abril”, pero, según explicó, en los meses de mayo y junio se frenó la tendencia al alza.