Las telas de la ropa, muebles, accesorios, lencería, etc., son variadas, y su cuidado depende de cada una de sus características específicas. Es decir, algunos textiles se pueden lavar con agua caliente, mientras que otros no. De igual manera, es posible que unas telas puedan lavarse en lavadora, mientras que es preferible evitarlo en algunas otras.
Partiendo de ello, te especificamos cuáles son esas telas que no debes meter en la lavadora bajo ningún concepto.
¿Cómo debe ser el lavado de las telas?
Lo idóneo es leer las indicaciones de las etiquetas de cada prenda de vestir, allí se especifica detalladamente no solo si se debe lavar con agua fría o caliente, si se puede usar lavadora o plancha, etc.
Incluso, indican si se pueden dejar en remojo, torcer para escurrir y hasta el ciclo de lavado más recomendado en caso de usarse la lavadora.
Sin embargo, en líneas generales, se debe usar jabón neutro y agua fría, evitar remojar, frotar y usar la secadora.
Evita meter en la lavadora
Evita a toda costa meter en la lavadora ropa de tela que se pueda decolorar, piezas impermeables, lencería con varillas metálicas, ropas con encajes o bordados o rellanas de plumas.
También debes evitar lavar prendas con brillos y adornos cosidos, zapatillas y ropa deportiva o tajes de baño.
En cuanto a las telas específicamente, la lana, la seda y los tejidos delicados no deben lavarse en la lavadora porque la fricción y el movimiento característico del artefacto puede deformarlas o romperlas.
De igual manera, se deben evitar meter en la lavadora las telas de algodón de las almohadas y cojines, o las telas de cortina, porque absorben mucha agua y las pueden estropear fácilmente.
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