La persecución de la Fiscalía en contra del ahora presidente electo y su partido, el Movimiento Semilla, comenzó tres semanas después de que Bernardo Arévalo avanzara al balotaje, cuando las encuestas lo situaban en un séptimo lugar.
“Insto a todas las instituciones y funcionarios del Estado a no prestarse a estas arbitrariedad ya que de acuerdo con lo expresado en el artículo 156 de nuestra Constitución, ningún funcionario o empleado público, civil o militar está obligado a cumplir órdenes manifiestamente ilegales”, concluyó Bernardo Arévalo.
Con información de Telesur TV.