La piel seca en algunas personas es a causa de una enfermedad subyacente, pero no siempre es el caso. En la mayoría de las personas, este tipo de piel se presenta a consecuencia de un ambiente seco, por lavarse la zona con frecuencia o no hidratarse correctamente.
Cuando esto ocurre, generalmente la piel se reseca, se vuelve áspera, escamosa, enrojecida y según expertos, en ocasiones puede llegar a causar dolor.
¿Qué es tener la piel seca?
Es una condición en la cual la piel que pierde agua y aceite, se torna, descamada y deshidratada.
Esta afección es más común de lo que se cree y puede afectar a las personas de cualquier edad y hasta extracto social. ¿Por qué ocurre? Esto se debe a que entre las causas se incluyen los cambios de temperatura, la exposición al sol, el uso de jabones agresivos, exceso de agua, mala alimentación, y deficiente hidratación.
Sus cuidados
Si eres de piel seca, debes cuidarla muy bien para evitar mayores daños. Y si necesitas un exfoliante, debes recurrir a productos específicos que cuiden y protejan la piel.
Una buena alternativa son los exfoliantes caseros, los cuales además de económicos y accesibles, no tienen mayores contraindicaciones.
Por ejemplo, prepara un exfoliante con avena, ingrediente que hidrata y equilibra el pH de la piel. Para prepararlo necesitas: una manzana, dos almendras, cinco cucharadas de avena y una cucharada de miel. Una vez con todos los ingredientes a mano lava la manzana, pélala y rállala, procurando eliminar las semillas, luego aplasta las almendras hasta que se hagan polvo. Coloca los ingredientes en un bol y mézclalos con una cuchara. Deja reposar durante 20 minutos y luego aplica sobre el rostro con movimientos circulares, deja actuar entre 15 y 20 minutos y finalmente, enjuaga con abundante agua fría.
Otra alternativa es preparar un exfoliante con azúcar y aceite de coco. Esta combinación es hidratante y ayuda a regenerar la piel.
Su preparación es sencilla, solo debes mezclar en un bol cuatro cucharadas de azúcar y dos cucharadas de aceite de coco, se deja reposar. Transcurrido unos minutos se revuelve para mezclar y formar la pasta que debes aplicar en la cara con movimientos circulares. Luego se deja actuar unos minutos y se retira con agua tibia.
