El Departamento de Educación de Nueva York lanzó este martes el Proyecto Brazos Abiertos, una iniciativa para ayudar a los más de 5.500 niños migrantes que han entrado a las escuelas públicas de la ciudad, donde han llegado junto con su familia en los últimos meses.
El comisionado de Educación, David Banks, indicó que un equipo de voluntarios apoyará a los recién llegados (la mayoría venezolanos) en asuntos como facilitarles el proceso de inscripción escolar.
“Es vital que estas familias se sientan bienvenidas aquí en nuestro país y en nuestra ciudad”, afirmó Banks. El anuncio lo hizo en una escuela pública de El Bronx, donde estudian 39 de niños procedentes de Chile, Venezuela, Colombia y Ecuador.
Nueva York y su proyecto para ayudar a padres
El Proyecto Brazos Abiertos también cuenta con ayuda para los padres en su lengua materna, apoyo para que sus hijos se registren en cursos de inglés como segundo idioma, bonos de transporte para estudiantes y padres, y actividades extraescolares para toda la familia.
Miles de migrantes han llegado a Nueva York desde mayo, algunos por su cuenta, pero la mayoría enviados en autobuses, sin coordinación con las autoridades locales, en una operación ideada por el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, lo cual causó una crisis en el sistema público de albergues.
La ciudad ha pedido ayuda económica al gobierno federal para afrontar la situación. Asimismo, la alcaldía tuvo que alquilar habitaciones en hoteles para dar alojamiento a los recién llegados.
Aseguran a familias con los recursos necesarios
Mientras esa ayuda llega, se asegurarán de que los niños y padres cuenten con los recursos necesarios, de acuerdo con Banks.
El Departamento de Educación tiene previsto expandir los programas bilingües en respuesta al flujo de migrantes. También está dando más fondos a las escuelas para que puedan contratar más personal y brindando ayuda en salud mental.
Para lidiar con la situación, habrá trabajadores sociales en cada escuela y están contratando a algunos, específicamente hispanohablantes, además de consejeros y en algunos casos especialistas en salud mental.
Trabajan duro para lograr el éxito
“Creemos firmemente que todo estudiante tiene derecho a una educación pública de alta calidad, independientemente de su estatus migratorio, y las escuelas de la ciudad seguirán cumpliendo con ese compromiso”, indicó el comisionado de Educación en un tuit.
“Estamos trabajando junto con nuestros socios de la agencia, personal y líderes de la comunidad para preparar a los estudiantes para el éxito al abordar sus problemas académicos, necesidades emocionales y sociales, y garantizar que no se interrumpa su educación”, dijo.
Con Información del Diario El Nacional.