Los juanetes son una desviación ósea del dedo gordo del pie hacia el resto de los dedos. Está causado por la prominencia de la cabeza del primer metatarsiano y la angulación inadecuada de la articulación. En palabras más sencillas, es el crecimiento extra de hueso y líquido en la base de dicho dedo.
Esta angulación ósea puede causar la superposición del dedo gordo con el dedo índice del pie, y suele ser muy doloroso. Las mujeres son las más propensas a sufrirlo, debido al calzado cerrado en punta utilizado por largos años. De igual forma, la aparición de juanete en la adolescencia puede deberse a causas hereditarias.
Prevención
Cuando comienza a aparecer la desviación del juanete, también llamado hallux valgus, lo ideal para detener que se siga desviando y que no cause dolor, es seguir las siguientes recomendaciones:
Como explicamos más arriba, usar zapatos inadecuados es el principal causante de esta protuberancia dolorosa en el pie. Así que lo primero que se deberá corregir es el calzado usado. Lo ideal es no utilizar zapatos de punta y sustituirlos por un calzado de punta espaciosa y cómoda para los dedos del pie.
En estos zapatos cómodos podrás incluir almohadillas o rellenos espaciales para juanetes. Estos actuarán como amortiguador entre el pie y el zapato, aliviando el dolor.
Si no te convencen las almohadillas, tendrás la opción de las plantillas acolchadas. Estas te ayudarán a distribuir la presión que se ejerce en el pie al caminar, repartiéndola de forma uniforme, evitando que la lesión empeore.
Remedios para aliviar el dolor de los juanetes
A lo primero que los pacientes con juanete recurren es a los medicamentos. Entre ellos, los más usados son el acetaminofén, el ibuprofeno o naproxeno sódico y las inyecciones de cortisona.
Pero si eres de los pacientes que no se inclinan por los fármacos y prefieren terapias más naturistas, aquí te dejamos algunos remedios caseros que podrán ayudarte a aliviar el dolor.
Baños de sal: sumergir los pies en agua tibia con sales relajarán el área, eliminando el dolor. Coloca en un recipiente lo suficientemente grande para introducir tus dos pies, agua tibia (la cantidad necesaria para cubrirlos). Añade dos cucharadas de sal marina o sal de higuera y sumerge tus pies por 20 minutos. Esto deberás hacerlo todos los días para mantener el área relajada luego de la actividad diaria.
Hielo: método muy utilizado para finalizar la jornada laboral, o cuando estuviste muy activo caminando o de pie, y presentas el área inflamada. Aplica hielo sobre el juanete para aliviar el dolor y desinflamar. Si combinas el hielo con compresas calientes, ayudarás a mejorar la circulación sanguínea, que también será en pro de mejorar el dolor.
Alimentación: como todo, una alimentación balanceada repercute en todo relacionado a nuestra salud. Incluir alimentos como frutas, verduras y otros con propiedades, como el té verde, el jengibre, la canela o la avena, te ayudarán a tratar el dolor y la hinchazón en la zona pédica.
Aceites esenciales: masajear los pies con aceites esenciales aliviará notablemente el dolor. Esto se debe a que los aceites esenciales poseen propiedades antiinflamatorias, entre otras. Entre ellos puedes usar el aceite esencial de lavanda, el aceite esencial de caléndula o el aceite esencial de gaulteria.