Los bomberos de la región costera chilena de Valparaíso y las autoridades regionales dieron este miércoles por controlada la cadena de incendios forestales que se desataron el pasado viernes, arrasaron varias poblaciones en la comuna de Viña del Mar y causaron la muerte de al menos 131 personas.
El subsecretario de Interior y Seguridad Pública, Manuel Monsalve, ya advirtió que la situación había mejorado aunque se esperaba que este miércoles se mantuvieran altas la temperaturas con un alza igualmente de la humedad, lo que daba esperanzas de mejora frente a la emergencia.
Monsalve señaló, además, que tres de los focos que más preocupaban, el de el Complejo Las Tablas, de 8500 hectáreas: el de en Lo Moscoso, en la localidad de Quilpué y el incendio Tranque La Luz, en Valparaíso, estaban contenidos.
“Desde el punto de vista de los incendios, en términos generales, hoy día los incendios de la Región de Valparaíso están contenidos y, por lo tanto, esperamos su total control en los días que vienen y para eso están trabajando equipos, tanto en materia de aeronaves como de brigadas terrestres”, remarcó.
Mientras, se mantienen las labores de desescombro con mucha precaución, ya que todavía existen cadáveres entre las cenizas, y se han comenzado a disponer los elementos para la reconstrucción de una tragedia que ha causado daños de diversa consideración a más de 6.000 viviendas, una gran parte totalmente destruidas.
Hasta el momento, el número de fallecidos sigue en 131, con 35 identificados y 20 cuerpos entregados a las familias. Siete de ellos son menores de edad.
Además se mantiene el toque de queda nocturno en las comunas y localidades afectadas para evitar los pillajes, aunque ya no es generalizado sino que se limita a las zonas más afectadas.
