El Bosque Siberia es un gato bastante grande y de contextura musculosa. Tiene un pelo largo y denso que lo convierte en una de las razas más atractivas y por ende es candidato a ser una de las mascotas predilectas.
Este animal se cree que proviene del cruce de gatos domésticos llevados a Rusia y Ucrania con gatos salvajes de los bosques siberianos, razón por la cual se le denomina bosque Siberia.
Origen del gato Bosque Siberia
Existe documentación de gatos siberianos, como también se les conoce, en el año 1000, y se cree que es el antepasado de la mayoría de las razas de pelo largo. A pesar de ser una de las razas más antiguas del mundo no fue reconocida hasta 1987.
Esta raza se expandió por las frondosas arboledas de Rusia y Ucrania, y es por ello que se le conoce como el gato nacional de Rusia.
Así son…
Suelen ser de gran tamaño y constitución fuerte, el torso es en forma de barril y la cabeza es, en cierto modo, cuneiforme, con contornos redondeados y ojos redondeados y muy expresivos. Ellos pueden llegar a pesar hasta 9 kilos los machos.
Tiene un pelaje largo y denso que suele ser marrón atigrado, pero que también puede presentar otros patrones, colores y combinaciones como el chocolate.
Cabe destacar que, este animal ha desarrollado una constitución resistente y un pelaje triple capa resistente al agua. Tiene unos pelos más largos de color claro cerca de la raíz y que se oscurecen hacia las puntas. Gracias a ello, le da cierto brillo al pelaje del animal cuando se mueve.
Su desarrollo es muy lento, por lo que es probable que alcance la madurez hasta los cuatro o cinco años.
Su carácter
Quienes tienen este animal de compañía aseguran que es afectuoso y muy activo. Es una raza sociable y cariñosa que se adapta bien a otros gatos y animales.
Se adecúan tan bien a la familia, que constantemente piden atención y cariño de quienes habitan en el hogar.
Algunos pueden ser tímidos y huidizos, sobre todo al momento de llegar a casa, por lo que los amos deben hacer lo propio para ganarse su confianza.
Cuidados en casa
Si decides comprar o adoptar a esta raza de gato debes tener en cuenta que ellos no deben bañarse y además, es necesario cepillar su pelo de manera frecuente para eliminar la suciedad y los pelos de la muda.
Esto último es importante para evitar las bolas de pelo que puedan causar indigestión cuando ellos realicen el proceso de acicalamiento.
Por otra parte, se recomienda proporcionarle rascadores para evitar que rasque y deteriore los muebles.
Finalmente, se sugiere cuidar su alimentación para evitar el sobrepeso y los problemas asociados a ello; aunque por su origen salvaje es una raza fuerte y robusta, sin enfermedades congénitas destacables.
