Tener un gato como animal de compañía puede traerte muchas satisfacciones, pero al mismo tiempo podrá llenar tu hogar de malos olores. Para evitar esto último y tener una mascota sana, deberás mantener su caja de arena en óptimas condiciones.
Limpiar el arenero de tu gato es primordial para mantenerla limpia, y además, evitará que tu gato se enferme, así como también no se esparcirán por toda la casa los olores que desprenden sus necesidades fisiológicas.
Los gatos utilizan su caja de arena por instinto, para marcar su territorio y para ocultar su presencia a los depredadores. Es por esto que es tan importante tenerla en casa cuando se tienen gatos de compañía.
Este instinto florece en los caninos a partir del mes de nacido, cuando el gatito comenzará a ocultar sus heces para eliminar el olor y evitar que la presa los localice. De aquí su importancia para no tener malos olores dentro de casa.
Tipos de arenas
Existen dos tipos de arena para tu gato, la no aglomerante y la aglomerante. Cada una de ellas tendrá una frecuencia de limpieza diferente. Pero no solo el tipo de arena será clave para saber limpiarla, sino que la ubicación de la caja y los hábitos de tu mascota también serán relevantes.
Lo recomendable es eliminar los restos de heces y orina a diario de la caja de arena de tu gato. Si tu arenero posee arena aglomerante deberás cambiarla dos veces por semana, mientras que si es aglomerante podrás dejarla sin sustituir hasta siete semanas.
Paso para limpiar el arenero del gato
Antes que nada, elije bien el lugar donde hará la limpieza de la caja. Lo recomendable es hacerlo en el jardín o área abierta, pero de no tener este espacio podrás realizarlo en el salón de baño.
– Vacía la arena de la caja ayudándote de una pala. Coloca todo dentro de una bolsa de basura para su posterior eliminación.
– Si estás en el jardín, utiliza la manguera para lavar muy bien la caja utilizando agua a presión. Asegúrate de colocar unas gotas de jabón antes y utilizar agua caliente. Si lo realizas en el baño, meta el arenero bajo la regadera.
– Deja correr el agua a presión por 15 minutos aproximadamente para así ablandar cualquier resto de excremento seco presente. De esta forma se ablandará y se eliminará fácilmente.
– Transcurrido el tiempo, utiliza un cepillo con jabón para frotar las manchas adheridas en la superficie y lava con abundante agua.
– Es normal que el orina de gato deje manchas blancas en la caja. Para esos casos utiliza un poco de vinagre blanco y frota bien para eliminarlas.
– Una vez limpia la caja, seca frotando un paño limpio sobre la superficie. Asegúrate de secar tanto por dentro como por fuera.
Una vez ya limpio el arenero podrás colocarla en suposición dentro del hogar y verter la nueva arena.
Con información de Diario 2001
