La cebolla es una planta herbácea cargada de beneficios. No solo se trata de un recurso culinario de primer grado, sino que su composición, rica en numerosos minerales y vitaminas, nos permite combatir la tos.
La cebolla es un producto rico en azufre, que al volatilizarse en el aire nos hace llorar, pero que también es una solución perfecta para poder pasar mejores noches ya que ayuda a descongestionar la nariz y calmar los ataques de tos, así como a rebajar la intensidad de las mucosidades.
Independientemente de que sean moradas, blancas o secas, lo importante es que tengan un aspecto uniforme, sin ramificaciones, brotes y conservando su piel intacta.
Consumir cebolla cruda también es una opción muy recomendable para mejorar los síntomas del proceso catarral. Nuestro cuerpo adquiere las vitaminas presentes en este bulbo, especialmente rico en vitamina C, por lo que la mejora puede ser aún más rápida.
¿Por qué es efectiva la cebolla como remedio natural en caso de resfriado?
Al ser rica en polifenoles, permite descongestionar la nariz de manera natural y es un excelente mucolítico natural. De igual forma, es un potente remedio casero contra la tos, que al presentarse de forma común en ataques por la noche puede impedir el correcto descanso.
No se trata de un producto milagroso, sino que hay una evidente explicación científica, señal de que las plantas son buenas para poder tratar ciertos síntomas. La farmacología se basa en parte en las propiedades de las plantas para elaborar algunas soluciones, conociéndose dicha parte de esta como fitoterapia.
La cebolla nos ayuda a pasar mejores noches en caso de procesos gripales. Para ello, es conveniente cortar una pieza de cebolla en 2 mitades, troceándolas, de tal manera que puestas en la mesita de noche vayan liberando sus aromas.
Cuanto mayor sea la superficie de cebolla expuesta mayor será la eficacia ya que se liberan más sustancias. Estas sustancias, al entrar en contacto con el aire, conseguirán que la frecuencia de la tos sea menor, así como que el moco se fluidifique.
El alivio de la congestión es evidente y proporcionará unos momentos de descanso muy necesarios. Como contraposición, tendremos un olor fuerte en la habitación que puede resultar algo desagradable.