El gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y Junts per Catalunya cerraron este jueves el acuerdo para la ley de amnistía, que era uno de los puntos negociados para que la formación catalana apoye la investidura del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, reportan medios locales.
Ahora que Sánchez cuenta con 173 votos confirmados de Junts, Sumar, ERC, EH Bildu y BNG, solo falta por firmar el acuerdo con el Partido Nacionalista Vasco (PNV) para superar la mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados.
La fecha límite para que Sánchez consiga revalidar el cargo de presidente del Gobierno para los próximos cuatro años, antes de que se produzca una repetición electoral, es el 27 de noviembre. Para ello, debe contar con el respaldo de la mayoría del Congreso de los Diputados.
Los votos de ERC y Junts, cada uno de los cuales le da siete respaldos que necesita de manera ineludible, le han vendido caros. Las formaciones catalanas no le pusieron fácil las negociaciones después de seis años de la mayor crisis política de España, con el estallido del ‘procés’, el intento secesionista de Cataluña y exigencias de la amnistía a todos los implicados en aquellos hechos.
La ley de amnistía, que da vía libre a la investidura de Sánchez, generó multitudinarias protestas en el país. Entre insultos, improperios y gritos de “¡Gobierno comprado!”, “Puigdemont, a prisión”, “España no se vende, se defiende” y “La Policía defiende la amnistía”, las concentraciones, marcadas por enfrentamientos con las fuerzas policiales, clamaron contra la amnistía para los “traidores” de España.
“¡Que te vote Txapote!”, gritaron los manifestantes, en referencia al miembro de la organización terrorista vasca ETA que cometió asesinatos. Este lema se ha convertido en uno de los más populares durante las actuales protestas.
