|| Fernan Hernández/Luis Chunga
Al menos tres sujetos le quitaron la vida a un hombre y a una mujer embarazada, que perdió a su bebé
Conmocionada quedó la comunidad de Samán Tarazonero, municipio Mariño del estado Aragua, luego del asesinato de Yubrasca Antonieta Guédez, de 29 años y de su bebé de ocho meses de gestación, así como de un familiar identificado como José Antonio Vargas Morales, de 36 años, en el interior de una vivienda, hecho ocurrido la noche del pasado miércoles.
La policía científica investiga lo sucedido, pero de manera extraoficial se conoció que el móvil que cobra mayor fuerza es el del sicariato.
En las primeras pesquisas que adelantan los cuerpos policiales, señalan que al menos tres sujetos desconocidos habrían participado en el crimen.
Un primer atacante que llegó hasta el lugar, donde la joven vendía verduras, preguntó a Yubrasca por el precio de unas papas, luego salió, en menos de cinco minutos llegaron otros dos hombres que le efectuaron un tiro en el pecho y dos en la cabeza a Vargas.
Inmediatamente, le dieron el tiro en la cabeza a la joven madre, para luego huir del lugar.
Ambas víctimas fallecieron de manera instantánea, pero en un intento de salvar al bebé que nacería entre ayer y hoy, según la planificación familiar, la muchacha fue traslada a un centro de salud cercano donde lamentablemente no pudieron sacar al pequeño con vida.
VENGANZA
Una fuente policial informó que por los elementos de interés criminal colectados en la escena, testimonios y la manera cómo actuaron los asesinos, presumen que se trate de una venganza o sicariato, pero habrá que esperar la conclusión de la investigación para determinar lo que realmente ocurrió.
Por ahora, se ha dispuesto de un fuerte operativo en las barriadas del municipio Santiago Mariño para dar con los autores materiales e intelectual de este triple asesinato, donde al parecer las pesquisas van bien adelantadas.
| PENSABAMOS ERAN FOSFORITOS
Para conocer más detalles del vil asesinato, el equipo de El Periodiquito llegó a la casa de la infortunada, donde en medio del dolor, familiares contaron que en la casa de dos pisos, viven varias personas, “ninguna con antecedentes penales o de mal proceder”. Sin identificarse, contaron que Yubrasca estaba en el garaje donde funciona la venta de verduras, “haciendo unos cotillones”, junto a su concuñado, cuando sin que aparentemente alguien se diera cuenta, fueron atacados. “Yo pensé que las detonaciones eran algunos “fosforitos”, pero cuando bajé me encontré frente a la tragedia familiar. No sabemos qué es lo que en realidad pasó, aquí vivimos gente trabajadora e inocente”, aseguró la madre de la muchacha. |
