Un brote de hepatitis E ha dejado al menos 12 muertos en dos regiones del este de Sudán del Sur, en medio de alertas de que la enfermedad se extiende hacia otras regiones del país africano, informó hoy un comunicado del Ministerio de Salud sursudanés.
Los casos, cuyo número total se desconoce, fueron registrados en el estado de Jonglei y la región de Gran Bibor, “en su mayoría de mujeres en edad reproductiva”, dijo la nota.
Apuntó que el citado departamento ha sido alertado sobre el brote de la enfermedad por agencias humanitarias operativas en la región, y que las pruebas realizadas en cooperación con Médicos Sin Fronteras “confirmaron la presencia de casos en Jonglei y Pibor”.
“La tasa de mortalidad ha alcanzado 12 casos desde mediados de septiembre, la mayoría en la zona de Fangak, en Jonglei”, dijo el viceministro de Salud, Machar Ader, según el comunicado.
Subrayó que “el promedio de la edad de los afectados es de 33 años, la mayoría son hombres”, sin especificar números, si bien enfatizó que “de las 12 muertes registradas, ocho son mujeres en edad de entre 24 y 25 años”.
Se trata de uno de los tipos menos conocidos de hepatitis, cuyos síntomas comprenden, entre otros, color amarillento en la piel, orina oscura y fatiga extrema.
Su transmisión se ve favorecida por la contaminación del agua y la falta de higiene y de adecuadas estructuras de saneamiento.
Para evitar la propagación de la enfermedad, el responsable del país africano, uno de los más pobres del continente, llamó a la población a “seguir medidas preventivas, especialmente lavarse las manos con jabón y beber agua limpia”.