Agencias Nacionales
De acuerdo al más reciente Informe de la organización Human Venezuela, el año pasado hubo “una caída mayor a 60% de la cantidad de agua distribuida y de 90% en el funcionamiento de la infraestructura, equipamiento y sistemas de gestión y calidad del agua”.
Las restricciones en este servicio aumentaron debido a que creció la duración de los racionamientos que afectaron a 69,1% de la población.
A esto se sumó que 86% de la población estuvo expuesta a fuentes de agua contaminada, “observándose altas señales de contaminación por el color”.
A falta de saneamiento, subió “el porcentaje de personas en hogares sin acceso a servicios de cloacas y aseo urbano en la comunidad”.
Para 2022 y 2023 se incrementó el porcentaje de venezolanos afectados por restricciones constantes de agua, pasando de 66,8% a 69,1%.
“Un 16,9% no recibió agua durante dos o más meses o nunca la recibió, 9,9% la recibió una vez al mes, 8,7% cada dos semanas y 12,4% una vez a la semana. Mientras, 49,1% de las personas utilizaron la poca agua recibida para distintas actividades de higiene del hogar e incluso para la higiene personal y la relacionada con la higiene de los alimentos o de los utensilios para cocinar”.
A su vez 33,4% redujo las cantidades de ingesta de líquidos diarios. Mientras 86% de la población utilizó fuentes de agua alternativas, teniendo que almacenar en botellones, bidones, además de la contratación de cisternas de agua.
*BALANCE EN CIFRAS*
53,7% transportó el agua a pie, gran parte caminando largas distancias.
60,2% almacenó agua en bidones o envases de pequeño tamaño.
+10,7% creció el número de personas que utilizan pozos subterráneos para abastecerse de agua.
+15,9% subió el uso de las pilas o tomas públicas.