La clara de huevo aporta una elevada cantidad de proteínas, vitaminas y minerales que mejoran y aseguran la recuperación muscular y ósea. Además, sin materia grasa y con pocas calorías, ayuda a obtener la energía gastada y a formar glóbulos rojos en la sangre.
Este alimento con tantos beneficios para el cuerpo y el organismo en general, también se puede incluir en las rutinas de belleza, sobre todo para cuidar el rostro.
¿Qué nutrientes tiene la clara de huevo?
Contiene colina, riboflavina, ácido fólico, yodo, hierro, proteína, selenio, vitaminas A, B12, B5, D y E, que aportan gran variedad de beneficios al organismo.
Pero, además, posee propiedades astringentes naturales que ayudan a controlar la producción excesiva de sebo en la piel.
Su uso en el rostro
El huevo es un ingrediente natural que ayuda a combatir los puntos negros y el acné.
Ten presente que solo necesitas la clara, que gracias a las proteínas que contiene ayuda a regular la producción de sebo y a cerrar los poros.
De igual manera, minimiza las arrugas, reduce las impurezas, hidrata la piel, reduce las bolsas de los ojos, exfolia y atenúa las manchas, y hasta mejora la salud de los párpados.
¿Cómo se aplica? Lava muy bien todo el rostro y luego coloca la clara de huevo como una especie de mascarilla y deja actuar durante 20 o 30 minutos.
Cabe acotar que, ésta se endurecerá, por lo que no conviene aplicar en el contorno de los ojos.
Transcurrido el tiempo, enjuaga con agua tibia, seca muy bien y aplica la crema hidratante de acuerdo a tu tipo de piel.
¿Quiénes pueden usarla?
Se recomienda utilizar en pieles grasas o propensas al acné, ya que puede ayudar a reducir el brillo y minimizar los poros dilatados.
