Todos queremos lucir las paredes de nuestro hogar en perfecto estado, ya que no necesitamos tener niños o mascotas para que estas se ensucien. Con el pasar del tiempo las paredes acumulan polvo y todo tipo de suciedad, que quitarlo a veces puede resultar tedioso, pero con un final muy gratificante.
No necesitas pintar o empapelar las paredes de tu casa para que luzcan limpias y como nuevas. Puedes obtener el mismo resultado limpiándolas, y aquí te explicamos cómo hacerlo.
Paredes limpias
Para empezar, deberás retirar todos los muebles que se encuentran pegados a la pared que se va a limpiar. Una vez que el salón está despejado de mobiliario, podrás empezar con la tarea de limpieza sin preocuparte por dañar algún mueble.
Si no tienes otra habitación donde colocar los muebles que moviste, asegúrate de cubrirlos con alguna manta o plástico protector. De esta forma no correrás el riesgo de que se manchen con alguna salpicada de la limpieza.
Comienza la limpieza retirando con una escoba o cepillo suave el polvo y telarañas que se encuentran en la superficie de la pared. La aspiradora también es muy útil para este paso, ya que retirará el polvo sin esparcirlo por toda la habitación.
Una vez libre de polvo, prepara una solución de una taza de vinagre blanco en un balde de agua tibia con un poco de jabón neutro suave. Una vez mezclado todo, procede a pasar un cepillo por toda la superficie de la pared. Asegúrate de hacerlo de la parte superior de la pared hacia abajo, y abarcando un metro de superficie a la vez. De esta forma lo harás en forma ordenada sin dejar ningún punto sin limpiar.
Si la pared es blanca, puedes agregarle a la mezcla una taza de bicarbonato de sodio. Esto ayudará a banquear la pared.
Si hay alguna mancha un poco más resistente, repite el procedimiento hasta que la mancha desaparezca.
Cuando realices la limpieza de la pared deberás cambiar el agua del lavado cada vez que notes que se va ensuciando. De lo contrario, lo que estarás haciendo será esparcir la suciedad por toda la pared y nunca quedará limpia.
Remate
Una vez terminado el proceso de limpieza, pasa un paño limpio con agua clara por toda la pared para terminar de remover el producto de limpieza que haya quedado en ella.