Fumigar los espacios del hogar es el procedimiento más seguro para evitar que aparezcan roedores, plagas e insectos.
Por más que limpie, a veces hay detalles que atraen a estas alimañas, en el caso de los roedores consiguen entrar a través de agujeros o espacios que tiene en su hogar y consiguen quedarse en lugar en busca de comida y refugio.
Los insectos y plagas entran por la ventana, desagüe o tuberías estos también buscan mantener y reproducirse en espacios como la cocina.
Por eso, es importante erradicar o prevenir la presencia de estos animales que pueden estar ocultos en determinados espacios.
Para lograr una buena fumigación se utilizan agentes químicos “fumigantes” y según el tipo de plaga se debe emplear el veneno.
Pasos previos antes de la fumigación
1 Haga una limpieza previa a la fumigación
2 Saque toda la basura que tenga en la casa e incluso aquellos cajas de cartón o madera que puede atraer alimañas.
3 Desconecte todos los equipos eléctricos.
4 Tape y guarde muy bien los alimentos, de manera de protegerlos de estos químicos.
5 Verifique qué tipo de plaga tiene en casa para buscar el producto que mas le sirva.
Día de fumigar
Abra las puertas y ventanas para que se ventile a medida que va colocando el producto en todo el hogar.
Saque y retire las mascotas y las plantas.
Adquiera un equipo de fumigación adecuado.
Busque implementos de seguridad para protegerse como tapabocas, traje, gorra, guantes y lentes.
Ventajas de fumigar
Mantiene la casa libre de bichos, roedores, plagas e insectos.
Garantiza mejores condiciones sanitarias.
Reduce el riesgo de enfermedades.
Genera un buen saneamiento e higiene.
Recomendaciones
No se quede en casa al momento de la fumigación para evitar inhalar los pesticidas.
Abra las ventanas y mantenga todo ventilado después de la aplicación del producto.
Permanezca alejado de las áreas donde se fumigo.
Antes de la fumigación guarde platos, comida y juguetes de los niños.
Si tiene mascotas sáquelos también de la casa mientras fumigan.
Con información de Diario 2001