Consumir tuna es de gran beneficio para la salud en general. Esta fruta contiene una alta concentración de calcio, potasio y magnesio, los cuales son minerales que favorecen el cuidado de los huesos.
También contienen betacarotenos, vitamina, flavonoides y fibras, que ayudan a cuidar el organismo.
Existen varios tipos de tunas: rojas, anaranjadas y verdes. Todas se pueden consumir enteras o en diferentes preparaciones.
¿Cómo consumir tuna?
Una de las mejores alternativas de consumir esta fruta es entera, en almíbar, jugos, aguas frescas, mermeladas, postres, licores y abrillantadas en almíbar.
La recomendación en cuanto a su consumo es de dos unidades en una comida.
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¿Para qué sirve?
Gracias a todos los beneficios que aporta a la salud, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda su consumo.
En tal sentido, conocedores de la materia aseguran que consumir tuna es una alternativa natural para disminuir los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre. También reduce los problemas asociados al corazón, gracias a su contenido de Cantina.
Incluso, ingerir las semillas de la fruta ayuda a reducir los problemas de estreñimiento, combate la gastritis, la acidez estomacal y la úlcera gástrica.
Además, sirve de diurético, por lo que favorece la función de los riñones al aumentar el flujo de orina y su alcalinidad. Por otra parte, mantiene estable el nivel de azúcar en la sangre, por lo que es altamente recomendado para las personas con diabetes.
Finalmente, y no menos importante, por su contenido del 80% de agua, reduce el apetito y favorece la pérdida de peso.
De interés
Desde la antigüedad, esta fruta se utilizó en el área de la medicina para tratar y curar heridas, hasta para bajar la fiebre.
