El calabacín es una hortaliza alargada que pertenece a la familia de las cucurbitáceas, se reconoce por su piel verde.
Posee propiedades nutritivas propias y su principal componente es el agua, seguido de los hidratos de carbono, pequeñas cantidades de grasa y proteínas.
Además, tiene algo de fibra, lo que lo convierte en un alimento de bajo aporte calórico, idóneo para incluir en la dieta de personas con exceso de peso.
En relación con su contenido vitamínico, destaca la presencia discreta de folatos, seguido de la vitamina C.
También contiene vitaminas del grupo B como B1, B2 y B6, pero en menores cantidades. Tiene un escaso aporte de grasas, y contiene folatos y vitamina C, entre otros nutrientes.
Beneficios para la salud
Es ideal para adelgazar
Favorece el sistema inmunológico
Ayuda al sistema nervioso
Es un poderoso diurético, actúa estimulando la eliminación de líquidos en el organismo.
Proporciona colágeno
Resulta un excelente tratamiento para las quemaduras.
Está muy recomendado para tratar espasmos estomacales y situaciones de diarrea.
Controla el colesterol
Fortalece la vista gracias a luteína y la zeaxantina.
En los hombres no aumenta el riesgo d cáncer de próstata.
Previene el desarrollo de muchos trastornos hiper-inflamatorias como el asma, la osteoartritis y la artritis reumatoide
Valor nutricional por cada 100 gramos
Calorías 23
Hidratos de carbono 2 g
Grasas 0, g
Proteínas 1,8 g
Propiedades y cualidades del calabacín
El consumo de esta hortaliza ayuda en gran medida al cuerpo humano, uno de sus principales beneficios es la absorción de la grasa y los azúcares. Esto es posible, gracias a un componente o “gel” que interviene y evita que sea absorbido.
Otro punto a favor y que es importante resaltar, es que el consumo diario del calabacín favorece al control de la presión sanguínea, por lo que se recomienda a las personas con problemas de hipertensión o con presión arterial alta.
Con información de Diario 2001