Shanae Davis, una madre de 39 años de West Palm Beach, Florida, enfrenta cargos después de que el personal de una guardería encontrara un arma de fuego dentro de la lonchera de su hijo de 2 años. El hallazgo se produjo en una guardería en Riviera Beach, cuando una maestra abrió el artículo escolar y se topó con una pistola Glock 43 de 9 mm.
La mujer fue acusada de varios delitos, incluido el permitir que un menor obtenga un arma de fuego y el de negligencia infantil. Según los documentos policiales, la madre solía guardar la pistola en la guantera de su vehículo. Sin embargo, debido a varios robos en su complejo de apartamentos, recientemente había comenzado a llevar el arma a su apartamento para mayor seguridad.
La noche anterior al incidente, Davis colocó el arma en la lonchera de su hijo para transportarla dentro de su domicilio, alegando que no lleva bolso. Olvidó retirar el arma la mañana siguiente, lo que condujo a su descubrimiento por parte del personal de la guardería. Tras el hallazgo, la policía fue llamada al lugar y Davis fue arrestada. Más tarde, fue liberada tras pagar una fianza.
El incidente generó un profundo impacto entre los padres de otros niños que asisten a la guardería. “Es aterrador”, dijo Stephenne Warembourg a los medios locales, subrayando la inseguridad que este tipo de incidentes provoca entre las familias que confían en la protección de sus hijos a estas instituciones. Otro padre, Al Canscel, expresó su terror ante la posibilidad de que sucesos como este puedan ocurrir en lugares destinados a ser seguros para los niños.
Especialistas en seguridad y miembros de la comunidad han comentado sobre la necesidad imperativa de adoptar medidas de precaución cuando se tienen armas de fuego en el entorno familiar. “Las cosas como esa son extremadamente prevenibles”, mencionó Kimberly Worth a CBS News, destacando la importancia de tener un plan específico para el almacenamiento seguro de las armas, lejos del alcance de los niños.
Con información de Infobae
