Sin máscaras ni restricciones sanitarias, inició desde el pasado viernes en el primer festival de Coachella desde el inicio de la pandemia de COVID-19, en el desierto de California.
Miles de personas se congregaron en la ciudad de Indio, en el Valle de Coachella (oeste), para concurrir al famoso festival musical.
El evento musical, que se celebrará durante dos fines de semana de tres días, abrió tradicionalmente la temporada de conciertos en el país norteamericano. Este año, se incluye a estrellas como Billie Eilish, Harry Styles, The Weeknd, Anitta y Nathy Peluso.
Aunque algunos festivales masivos, como el Lollapalooza, exigieron pruebas de vacunación y exámenes para descartar el contagio del virus, Coachella anunció que no imponía ningún tipo de restricción, ni siquiera uso de mascarillas, ni distanciamiento.