La cera en los oídos es completamente normal en todas las personas e incluso es sano. El tener cera, cerilla o cerumen como también se le conoce, no es sinónimo de suciedad o falta de higiene.
Ésta se produce en unas glándulas especiales en el tercio externo del conducto auditivo.
¿Qué es la cera en los oídos y cuál es su función?
Es una sustancia blanda, amarillenta y cerosa secretada por el oído, y su función es proteger la piel que reviste el conducto auditivo. Este es un agente natural de aislamiento contra el agua.
Además, ésta, junto a los vellos que hay en los conductos auditivos atrapan el polvo y otros materiales que podrían dañar las partes más profundas del oído, como el tímpano.
Según los expertos, ésta tiene características antimicrobianas, que cuando está nueva es de color amarillo dorado, pero cuando está vieja se reseca y se vuelve de color marrón o negro.
Síntomas de exceso
– Puede incitar a que la persona se frote el oído y meterse el dedo en el conducto auditivo.
– Cuando la cera se seca y endurece en el conducto auditivo, provoca la sensación de que hay un objeto en el oído.
– El exceso de cera produce un taponamiento del conducto y ello puede reducir la audición.
Con información de Diario 2001
